SIN SOLUCIÓN. Aunque en 2012 se hicieron intentos por disminuir la problemática del grafiti, no se concretaron.
El grafiti es un serio problema de contaminación visual y de daño a las propiedades, tanto públicas como privadas, sin que hasta el momento se haya encontrado una solución para disminuirlo o atenderlo debidamente.
En el transcurso de 2012, se hicieron algunos intentos por frenar o aminorar esta práctica por parte de las autoridades municipales de Gómez Palacio, tales como el endurecimiento de las multas que establece el Bando de Policía y Buen Gobierno en su Artículo 261, lo cual no se llevó a cabo.
Una comisión interinstitucional convocó a distintos sectores de la sociedad para tratar de involucrarlos, así como a los jefes de familia para ejercer una mayor vigilancia sobre sus hijos, además de emprender algunas campañas de limpieza de bardas. Sin embargo, muchos señalamientos, propiedades públicas y privadas, incluso parques siguen siendo objeto de esta práctica.