Omar Asad lamentó que los silbantes entren predispuestos hacia su jugador, Vicente Matías Vuoso. (Jam Media)
Atlas no ha ganado un solo partido después de 12 jornadas del Torneo Apertura 2013. Y el técnico argentino, Omar Asad, culpa de ello, en gran parte, al arbitraje. Considera que le arrebataron la victoria ante Chivas del Guadalajara en el Clásico Tapatío que terminó 1-1. No puede más. Explota contra los silbantes.
Según su apreciación, no es la primera vez que dejan de señalarle. Se siente perjudicado. Afirma que para los árbitros del futbol mexicano, Atlas es el "hazmerreír".
"Yo ya no confío más, no hablé nunca nada después de que me echaron ante Tijuana. Me callé los penales que me robaron, que son seis. El análisis que hago, yo no soy nadie y tómenlo como quieran, pero creo que los árbitros están hiriendo con sus actitudes, prejuzgan a jugadores en los 90 minutos", sentencia.
Y enseguida desata su "furia" contra los encargados de impartir justicia en cada encuentro: "¿De qué estamos hablando? ¡Ya basta! Somos el hazmerreír, los payasos. 'Me voy a divertir con Atlas', 'Me toca dirigir a Atlas y me divierto', hacen lo que quieren (los árbitros) y es la verdad".
El técnico resbala por un tobogán de enojo. Ya no tiene regreso. Se ha metido en problemas y dar marcha atrás es imposible. El único camino es hacia delante: continuar con su dura crítica. Así lo hace.
"Hay que cobrar lo que es y con esto no quiero condicionar que nos vayan a pitar (a favor) el próximo partido. Que sean honestos, yo no quiero pensar que lo hacen adrede o que los manda alguien, porque lo del otro día (el penal a Vuoso que no se marcó) fue llamativo. ¿Qué más tenemos que hacer? Que cobren lo que es, porque así se muere el futbol, con estos fallos se muere", asegura con furia.