'Toda transformación enfrenta resistencias', pero 'lo estamos logrando', afirmó Peña Nieto al hacer un repaso de las reformas estructurales que ha impulsado desde el inicio de su Administración, el 1 de diciembre pasado. (ARCHIVO)
El presidente de México, Enrique Peña Nieto, dijo que en sus primeros meses en el poder se ha dedicado a colocar los "cimientos" para lograr la transformación del país y confió en que las reformas que están pendientes salgan adelante.
"Toda transformación enfrenta resistencias", pero "lo estamos logrando", afirmó Peña Nieto al hacer un repaso de las reformas estructurales que ha impulsado desde el inicio de su Administración, el 1 de diciembre pasado.
"Este Gobierno no se ha apartado ni un ápice de la ruta que nos trazamos desde el principio" porque está convencido de que los ajustes son necesarios, sin importar las encuestas o los niveles de popularidad, señaló.
Durante su participación en la Cumbre de Negocios que se celebra en la ciudad de Guadalajara, el mandatario dijo que si se cristalizan todas las reformas, estarán colocando "cimientos muy firmes y sólidos" que permitirán al país tener "mayor crecimiento económico" y desarrollo social.
Destacó que el crecimiento económico del 2.1 % registrado en promedio en los últimos 10 años ha sido "insuficiente" y lamentó que el país no haya registrado el crecimiento que proyectó su Gobierno al inicio de 2013.
"El entorno internacional no lo ha permitido" y el cambio el cambio de Administración "lleva a una desaceleración en el ritmo de gasto de Gobierno", afirmó al justificar la reducción de sus previsiones de crecimiento del 3.5 al 1.7 % para este año.
Entre las reformas clave para detonar el desarrollo, mencionó la reforma en materia educativa, promulgada en febrero pasado, así como la de telecomunicaciones y competencia económica, ya probadas por el Legislativo pero cuyas leyes secundarias aún están pendientes.
También destacó la importancia de la reforma financiera, que aún está pendiente en el Senado, y que busca impulsar el acceso a créditos más baratos y convertir a la banca de desarrollo en una "palanca" del crecimiento económico del país.
En la reforma fiscal, también pendiente de debatir en la Cámara alta, más que imponer nuevos impuestos "cerramos privilegios" y vacíos legales que permiten a algunos contribuyentes eludir sus obligaciones tributarias, agregó.
Si bien la iniciativa busca una mayor recaudación, destacó su "alto sentido social", toda vez que los recursos adicionales serán destinados a la construcción de infraestructura, a la creación de un seguro de desempleo y una pensión universal a partir de los 65 años.
Sobre la reforma energética, admitió que es un "tema sensible" para los mexicanos, quienes consideran el petróleo un asunto de soberanía nacional.
La iniciativa mantiene la propiedad del Estado sobre los recursos energéticos del país, pero amplía "modalidades hoy probadas en el mundo entero" para explotarlos de manera más eficaz, dijo Peña Nieto, tras destacar que bajo el actual modelo el país se ha rezagado y dejado de ser competitivo en esta materia.
