Con dos meses de demora, la comisión de Gobernación del Ayuntamiento de Torreón exoneró ayer al tesorero Pablo Chávez Rossique de responsabilidad alguna por haber presentado a destiempo los avances de Gestión Financiera de los dos primeros trimestres de este año.
Apenas un día antes, el martes 22, el tesorero se deslindó, por escrito, del incumplimiento y culpó al excontador general, Javier Riojas.
En su dictamen, los regidores, por mayoría de votos, acordaron pasar el informe a la Contraloría Municipal "para que sea esta autoridad la que determine el procedimiento a seguir contra Javier Riojas, que pudiera ser una inhabilitación para ejercer el servicio público", según explicó el presidente de la comisión, José Elías Gánem.
Hace meses que Riojas dejó de trabajar en la Tesorería Municipal, pues renunció por desacuerdos precisamente con el tesorero y Miguel Ogazón, director de Egresos.
Gánem, también presidente de la comisión de Hacienda y Cuenta Pública, declaró que "aunque fuera mal, pero las cuentas públicas del segundo trimestre de 2013 se presentaron al Cabildo en los tiempos legales".
El caso del tesorero, contra quien la Auditoría Superior del Estado promovió desde el 16 de agosto de este año una sanción por violación a la Ley de Fiscalización Superior del Estado de Coahuila y que en segunda recomendación pidió su destitución, volverá de nueva cuenta a la Contraloría.
Para Natalia Virgil Orona, síndica de vigilancia y secretaria de la comisión de Gobernación, el dictamen emitido es la muestra "de la total impunidad que prevalece en el Municipio y una burla para la ciudadanía".
