Crimen. Con varios impactos de bala en la cabeza y el pecho, fue asesinado un joven cerca de su casa.
De varios impactos de bala fue asesinado un joven de 25 años en la orilla de la colonia San Alberto, cerca de donde vivía la víctima.
La Fiscalía General del Estado, informa que el occiso fue identificado en el mismo lugar de los hechos, por un familiar, como Ricardo García Barajas, de 25 años de edad y domiciliado en el mismo sector habitacional.
A las siete de la mañana del viernes, se recibieron varias llamadas en el 066 de Emergencias, reportando un hombre al parecer muerto por la avenida del Canal, entre las calle Iglesia Tesalónica e Iglesia Jerusalén, de la colonia San Alberto.
Paramédicos de la Cruz Roja fueron los primeros en acudir en auxilio del joven, pero al llegar constataron que ya no tenía signos vitales, motivo por el cual dieron parte a C-4 para informar que el hombre había muerto.
Poco más tarde acudieron al lugar indicado el agente investigador del Ministerio Público de Delitos Contra la Vida y la Integridad Corporal, acompañado de peritos de la Fiscalía General, elementos de la Dirección Estatal de Investigación (DEI) y del Ejército Mexicano.
En la escena del crimen, se encontraba el cuerpo sin vida del joven, a quien a simple vista se le apreciaban algunos impactos de bala en la cabeza y el pecho.
Cuando el agente del Ministerio Público y los peritos realizaban su labor para el levantamiento del cadáver, llegó una mujer que dijo ser hermana del occiso y dio sus generales.
Declaró la mujer que la noche del jueves, como a las 11:00 horas, salió su hermano de la casa con dos sujetos que lo fueron a buscar y que no conocía y ya no supieron de él hasta que les avisaron que estaba tirado cerca de su domicilio.
CASQUILLOS PERCUTIDOS
Cerca de donde se encontraba el cadáver, los peritos encontraron cuatro casquillos percutidos y tres hábiles de calibre .9 mm, que recogieron como evidencia.
Luego de realizar los primeros trabajos periciales, el agente del Ministerio Público dispuso el traslado del cadáver al anfiteatro del Servicio Médico Forense (Semefo), para la necropsia de rigor y posterior entrega a sus familiares.