Este cereal es rico en carbohidratos digeribles, sus vitaminas y minerales se encuentran en la cáscara y en el brote o germen. INTERNET
La avena es uno de los cereales más consumidos desde la antigüedad, ya que da grandes beneficios al organismo, es una excelente fuente de fibra y es rica en vitamina B1.
"Es rica en proteína, hidratos de carbono, grasas saludables, vitaminas, minerales y oligoelementos. Por lo mismo, es un alimento completo y soluble.
"Anteriormente, se realizaron algunos estudios sobre la avena, donde se demostró que contiene fibra dietética, capaz de reducir los niveles de colesterol en la sangre y de glucosa, así como el riesgo de cáncer intestinal", explica la nutrióloga Diana Andere Portas.
La avena es un pasto que pertenece a la familia de las gramíneas. Existen muchas especies y clasificaciones, entre ellas destacan la avena roja y blanca o amarilla; ésta última es la de mayor importancia comercial y alimenticia para el hombre.
Estudios realizados en Estados Unidos en 1995 por la Food and Drug Administration (FDA), organismo ocupado de regular la calidad de alimentos y medicamentos, comprobó que realmente el consumo regular de avena disminuye el riesgo de infartos y el colesterol en la sangre.
El 23 de enero de 1997, la dependencia gubernamental concluyó que, efectivamente, el consumo de fibra soluble contenida en productos de avena integral reducía el riesgo de ataques al corazón.
Este cereal es rico en carbohidratos digeribles, sus vitaminas y minerales se encuentran en la cáscara y en el brote o germen.
Su fibra dietética se divide en dos: soluble e insoluble. La soluble ayuda al organismo en las funciones cardiovasculares, los niveles de glucosa y a reducir la presión arterial. Por su parte, la insoluble es auxiliar en la digestión y reduce el riesgo de cáncer intestinal.
"Hay que tomar en cuenta que el consumo diario de avena proporciona tres gramos de beta-glucano, sustancia que reduce el colesterol en un cinco por ciento. Así también posee un gran efecto benéfico en la salud intestinal y en el sistema inmunológico.
"Se pueden integrar dos cucharadas diarias a cualquier alimento, esto aportará al organismo vitaminas E, B1, B2 y minerales como calcio, hierro, zinc, fósforo y magnesio", finaliza la experta.
