Un importante beneficio se ha logrado para algunos productores en el campo lagunero, a causa de las precipitaciones que se presentaron en los últimos días
Los forrajeros son principalmente los más beneficiados, además de que en esta ocasión se ha obtenido una mayor captación en las presas.
Sin embargo, también tienen un efecto negativo, como en el caso del algodón, que una lluvia por muy ligera, daña las fibras y reduce su calidad, complicando con esto la cuestión de la comercialización.
En el caso del municipio de Gómez Palacio, el porcentaje de cultivos de algodón es mínimo, por lo que estas precipitaciones resultan en mayor parte benéficas, señaló Alfredo Ordaz Hernández, dirigente del Comité Municipal de la Confederación Nacional Campesina (CNC).
"En los que respecta a los cultivos nos cae muy bien, es una lluvia muy esperanzadora y benéfica para los forrajes y en dado caso también para las presas", agregó.
Destacó que se están cortando ya las nuevas cosechas de forraje, obteniendo alrededor de 15 a 20 toneladas por hectárea, lo que servirá para alimentar al ganado y comercializarse.