Las autoridades afganas expresaron hoy su beneplácito a la decisión del presidente estadounidense Barack Obama de sacar en los próximos 12 meses del país asiático a la mitad de sus 66 mil soldados.
El portavoz del ejército, Mohammad Zahir Azimi, señaló que las tropas afganas están dispuestas a asumir la responsabilidad de la seguridad del país, luego que se retiren 33 mil soldados de Estados Unidos en los próximos 12 meses.
Durante el discurso del Estado de la Unión, el mandatario aseguró que con la retirada de las tropas dará por terminada la guerra en Afganistán, tras 11 años de conflicto.
En tanto, los talibanes advirtieron que mientras haya tan solo un soldado estadounidense en Afganistán su insurgencia se mantendrá, reportó el canal afgano de noticias Khaama Press.
La retirada es mayor de lo que algunos comandantes de alto rango en Afganistán habían recomendado inicialmente. Los generales esperaban más tropas estadunidenses en el campo para respaldar al ejército afgano y a las fuerzas de seguridad.
Sin embargo, el presidente afgano Hamid Karzai había presionado por acelerar la salida de las tropas extranjeras de Afganistán y estuvo de acuerdo con Obama, el mes pasado, sobre el traspaso de las responsabilidades de seguridad a su país en los primeros tres meses del años.
La retirada de más de 30 mil tropas es la última fase de un plan de transición que Estados Unidos, Afganistán y sus aliados acordaron en las recientes cumbres de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en Lisboa, Portugal y Chicago.
Otras de las razones del retiro es que Estados Unidos y Afganistán aún no han acordado un acuerdo de seguridad bilateral que regule el estatuto de las fuerzas, incluyendo la controvertida cuestión de la inmunidad para sus tropas.
Si no hay acuerdo en este sentido, Estados Unidos no retendrá ninguna fuerza en Afganistán después de 2014, al igual que sacó las tropas de Irak a finales de 2011.
La coalición de la OTAN, liderada por Estados Unidos, tiene alrededor de 100 mil soldados en Afganistán, que saldrán a finales de 2014, aunque muchos países también aceleraran sus propios retiros.
