Fuerza. El exprimer ministro italiano Silvio Berlusconi saluda mientras pronuncia un discurso ante sus seguidores, en la protesta convocada junto a su domicilio del palacio Grazioli.
El exprimer ministro italiano, Silvio Berlusconi, anunció que permanecerá en la escena política, pese a que el Senado decidió su expulsión tras su condena penal definitiva por fraude fiscal.
Ante unas dos mil personas reunidas afuera del Palacio Grazioli, su residencia en el centro de Roma, Il Cavaliere reiteró sus acusaciones contra la magistratura y dijo que aún si queda fuera del Parlamento se mantendrá en la política.
"Es una jornada de luto para la democracia. A partir de 1994 (cuando se lanzó a la política), una magistratura de extrema izquierda se ha dado a la misión de llegar al socialismo por la vía judicial", aseguró.
Denunció que los jueces han buscado echarlo de la política con la serie de juicios por corrupción, asociación mafiosa, prostitución de menor, concusión o fraude fiscal que le han abierto.
"Han sido 52 los procesos que me han abierto en contra. Hemos luchado, nos hemos defendido, hemos usado muchos recursos económicos buscando no perder la serenidad", dijo.
Berlusconi, quien durante sus diferentes gobiernos despenalizó algunos delitos de los que era acusado, insistió en que ha librado sin ninguna condena un total de 41 juicios.
Pero, agregó, "los jueces cambiaron estrategia y tras militarizar las fiscalías han ocupado los colegios juzgantes y es por eso que han florecido las condenas".
Dijo que la condena definitiva por fraude fiscal en la compraventa de derechos televisivos de su empresa Mediaset, en la que se ha basado su expulsión del Parlamento, "está viciada" porque fue juzgado por magistrados "que tenían una idea predeterminada sobre mí".