El jugador de Boca Juniors, Leandro Somoza (i), ante Paulo Cruzado, de Newells Old Boys. (EFE)
Los argentinos Boca Juniors y Newell's Old Boys igualaron ayer a cero el partido de ida de los cuartos de final de la Copa Libertadores, también parejo en el juego, y decidirán la eliminatoria el miércoles próximo en Rosario.
Los boquenses dominaron en el primer tiempo, quedaron agotados físicamente y el Newell's controló el segundo, aunque hubo pocas ocasiones de gol en ambas áreas y escasas diferencias de poderío entre uno y otro.
El Boca Juniors mostró otra actitud, otro aspecto, otra ambición con respecto a las discretas impresiones que había dejado en los tiempos recientes, durante la primera parte del partido disputado en 'La Bombonera', sometiendo al Newell's a una intensa presión.
El equipo rosarino poco tuvo para mostrar en los 45 minutos iniciales, atosigado en la zona central del campo y descontrolado en defensa, donde Riquelme, Martínez y Blandi, impulsados por Somoza, Erbes y Erviti, rompieron su bloque defensivo en reiteradas ocasiones, aunque con escasa precisión cerca de los palos.
La mejor llegada la tuvo Scocco, que remató de volea al minuto 69 y el portero mandó a tiro de equina.