Bulevar Miguel Alemán, tramo correspondiente a Gómez Palacio.
En los últimos años del Siglo XIX, cuando Torreón, Gómez Palacio y Lerdo eran apenas unas pequeñas poblaciones, carentes de infraestructura urbana y de caminos adecuados para la comunicación de sus habitantes, la relación entre ´éstos, se realizaba a pie o utilizando carretas, tiradas por bestias de carga, o como jinetes de burros, caballos y mulas. La travesía era tortuosa, a través de veredas y labores agrícolas; entre huizachales y mezquites; por terrenos pedregosos, arenales y grandes lodazales en tiempos de lluvias.
Gómez Palacio, como municipio y ciudad, fueron fundados el mismo día: El 21 de diciembre de 1905. Este nacimiento se vino gestando desde el surgimiento del Ferrocarril Central Mexicano, en 1883. Cuando apenas cumplía 5 años de edad, en 1910, la violencia tocó a sus puertas y la transformó en "Cuna de la Revolución Mexicana en Durango", y a consecuencia del estado de guerra nacional, nuestro panorama local estuvo durante casi dos décadas, sujeto a los vaivenes de la confrontación armada, que con sus indelebles huellas de sufrimiento, incertidumbre, ausencia de seguridad y carencia de inversión, revirtieron los procesos de avance naturales de la Comarca Lagunera, que despuntaba exitosamente en la producción de bienes y servicios, actividades agropecuarias e industriales, que le habían ganado merecida fama de "Emporio de Progreso", además cosmopolita, que recibía en su seno a miles de extranjeros que venían en busca de encontrar mejores medios de subsistencia.
Nuestra ciudad, Gómez Palacio, tenía una escasa mancha urbana a principios del siglo anterior, que terminaba rumbo al sur, a la altura de la actual calle Mártires de 1910. Más adelante los terrenos eran yermos y solitarios, por lo que la población se encontraba aislada de las comunidades vecinas por falta de comunicaciones adecuadas; únicamente el tren y el tranvía ofrecían esas ventajas.
El avance de la tecnología automotriz, las necesidades de desplazamiento que suplieran la lentitud y la incomodidad de los vehículos de tracción animal y la consecuente pavimentación de esos breñales, aunados a la construcción del puente sobre el Río Nazas, obligaron a superar múltiples inconvenientes y dieron paso a una transformación permanente y definitiva, que gradualmente propició las facilidades de desplazamiento que ahora todos conocemos y disfrutamos. Los laguneros trabajaron duro para superar al medio y a costa de grandes esfuerzos lograron finalmente encaminarse al progreso y a fomentar en ese proceso la hermandad lagunera. El terreno estaba preparado para los grandes esfuerzos. El Automóvil Club de La Laguna, un organismo precursor, con aportaciones privadas, se lanzó a la tarea de construir el primer camino pavimentado, que vino a ser el antecedente del actual bulevar Alemán, columna vertebral de la comunicación de lo que ahora conocemos como el área metropolitana de La Laguna. Los primeros caminos que realizaron fueron el de Torreón hasta la calle Hidalgo de Gómez Palacio, y de Torreón a Lerdo, pero ante la carencia de recursos públicos, la construcción corrió a cargo del Auto Club, para lo cual se fijó una cuota de ingreso de cincuenta pesos, una mensualidad de entre tres y cinco, dependiendo del tamaño del vehículo y veinticinco centavos del distintivo que deberían colocar en lugar visible para tener derecho al uso de caminos, por haberlos construido particulares. Para vigilar el buen uso de la nueva infraestructura, se colocaron vigilantes en casetas en algunos puntos estratégicos, como en el paso del ferrocarril, donde años después se crearía el vado del Kilómetro 11-40, así como frente a la entrada de Lerdo.
El día 8 de mayo de 1922 se inaugura felizmente la calzada que une a Torreón, Coahuila, con la ciudad de Gómez Palacio, partiendo de las orillas del río Nazas hasta la calle Hidalgo de esta última comunidad. Esta vía tuvo un costo de dieciséis mil pesos, y estuvo a cargo del Automóvil Club de La Laguna.
El 17 de mayo de 1923, el general revolucionario Francisco Villa, jefe de la extinta División del Norte, junto con los generales del Ejército Federal, Eugenio Martínez, jefe de operaciones militares en Chihuahua y José Gonzalo Escobar, jefe de operaciones militares en La Laguna, realizaron un recorrido por Gómez Palacio, y conocieron la nueva carretera (actual bulevar Alemán), hecha por la asociación Auto Club. El general Villa elogió a los integrantes del Auto Club por los esfuerzos realizados, emprendiendo por la tarde su viaje de regreso a la hacienda de Canutillo a continuar con sus labores agrícolas. Éste sería su último viaje a La Laguna, antes de ser asesinado dos meses después.
El gran detonador del desarrollo de esa zona, sin duda alguna, fue la magna inauguración del puente sobre el río Nazas, realizada el 20 de noviembre de 1931, con lo que se cumplía el viejo anhelo de los laguneros, de tener comunicación en tiempos de lluvias, ya que en esas ocasiones, únicamente podían cruzar el río por los puentes del ferrocarril y del tranvía eléctrico, lo que complicaba la interacción cotidiana de sus habitantes.
Con el transcurrir de los años, importantes obras se fueron realizando, como el Centro Campestre Lagunero, inaugurado en 1934; el 20 de noviembre de 1937, se hizo lo mismo con el campo de beisbol del Km. 11-40, inmueble al que la gente le llamaba coloquialmente Estadio Carrizo, que luego se conoció, como el Estadio "Rosa Laguna". Con la instalación, en 1945, de la importante factoría "Industrias Unidas de La Laguna", se iniciaron las actividades vinculadas al procesamiento de granos; despepite y compresión de pacas, con aprovechamiento de los subproductos del algodón, particularmente en grasas y aceites. Con la Planta Termoeléctrica "La Laguna", que inició sus actividades el 7 de junio de 1948, y otras empresas importantes, se generaron miles de empleos en beneficio de la economía regional y nacional.
El moderno bulevar que permitía el flujo continuo de miles de habitantes de La Laguna, fue inaugurado el 23 de julio de 1950, por el presidente de la República, licenciado Miguel Alemán, con el nombre de "bulevar Miguel Alemán Valdés. Ha sido tan importante la construcción de esta carretera, que ha generado el progreso, la modernidad y la hermandad de los laguneros por más de seis décadas de servicio. Nos baste entender ahora, que precisamente estamos conociendo los trabajos de ampliación y modernización del paso a desnivel del 11-40, que nos ha proporcionado un servicio útil y efectivo que le da acceso diariamente a más de 70 mil vehículos, que ahora lo harán con mayor rapidez y seguridad, con lo que se podrá impulsar el desarrollo y crecimiento de Gómez Palacio.
