Terremoto. La población en Irán y Pakistán inició las labores de rescate tras el poderoso sismo.
Equipos de socorro y elementos de las fuerzas armadas paquistaníes buscan hoy a posibles sobrevivientes del terremoto de 7.8 grados Richter, que azotó la víspera la frontera entre Irán y Pakistán.
Las labores de búsqueda se concentran en la ciudad de Mashkal, en la provincia de Baluchistán, suroeste de Pakistán, donde más de dos mil casas de adobe fueron destruidas o sufrieron graves daños a causa del fuerte terremoto, según un reporte de la cadena Dawn.
Un terremoto de 7.8 grados en la escala de Richter sacudió la tarde de este martes la provincia de Baluchistán, en el sureste de Irán, cerca de Pakistán, con un epicentro localizado a unos 80 kilómetros al suroeste de la ciudad iraní de Savaran.
Contrario a Irán, centro del terremoto y donde las autoridades han confirmado sólo un muerto, 12 heridos y leves daños materiales, en Pakistán se han contabilizado 41 muertos, más de 250 heridos, muchos de ellos graves, y la completa destrucción de varias localidades.
Los equipos de rescate, apoyados por varios sobrevivientes, buscan muertos o heridos entre los escombros de miles de casas que se derrumbarn en Mashkal y otras regiones remotas del suroeste de Pakistán, que quedó incomunicado y sin servicio de energía eléctrica.
Miles de personas, incluyendo muchos niños, que perdieron sus hogares se han refugiado bajo las copas de grandes árboles en espera de la llegada de ayuda por parte del Ejército.
En medio de intenso calor, los damnificados buscan entre los restos de sus casas, víveres, agua y materiales con los que puedan improvisar algún refugio temporal, en medio de las fuertes réplicas que siguen sacudiendo la zona.
Un fuerte sismo de 5.7 grados en la escala de Richter sacudió esta miércoles la misma zona del terremoto de ayer, a más de 100 kilómetros al este de la ciudad iraní de Khash, sin que hasta ahora haya ningún reporte de víctimas o daños por este nuevo temblor.