Detención. Agentes del FBI arrestaron a Francisco Colorado Jr. por un plan para sobornar al Juez Sparks con un millón de dólares.
¿Cuánto por el juez y cuánto por ti?-, preguntó Francisco Colorado Jr., de 25 años de edad, al contacto que supuestamente sobornaría al juez Sam Sparks para rebajar, lo más posible, la condena de cárcel de su padre, el empresario veracruzano Francisco Colorado Cessa, declarado culpable de lavar dinero de Los Zetas.
"1.2 millones de dólares para el juez, 25 mil dólares de comisión para mí", respondió el contacto, al tiempo de precisar que el juez quería un adelanto de 250 mil dólares el 28 de agosto, una semana antes de la audiencia en la que decidiría la pena para Colorado.
El contacto, que en teoría jugaba golf cada semana con el juez, y le entregaría el dinero en una bolsa para palos, en realidad era un agente encubierto de la Policía de Austin, Texas, y formaba parte de una operación del FBI que durante dos meses siguió cada detalle del intento desesperado del joven por sacar a su padre de prisión.
El miércoles, el FBI acusó ante la Corte a Colorado Jr. y a Ramón Segura Flores, un amigo de su padre, por conspiración para sobornar a Sparks, que al día siguiente impuso a Colorado Cessa la pena máxima de 20 años de cárcel.
Robert P. Mundy, agente especial del FBI, responsable de la investigación, declaró en la acusación que en julio recibió el tip de una fuente vinculada a grupos criminales, que le dijo que había participado en una conversación sobre un soborno de un millón de dólares en un caso federal. El informante de Mundy consiguió que uno de sus socios (identificado como CS2) lo presentara con Segura, de 52 años. CS2 era amigo del compañero de celda de Colorado en la prisión de Bastrop, y el punto era que el empresario -cuya defensa estuvo a cargo de Mike DeGeurin, uno de los penalistas más prestigiados de Texas-, estaba buscando a un abogado dispuesto a pagar el soborno.
El 13 de agosto, Segura se reunió en un Starbucks de Austin con CS2 y otra persona, un supuesto abogado que en realidad era un agente encubierto del FBI.