El Senado de la República modificó la Miscelánea Fiscal 2014 para aumentar de 5% a 8% el impuesto especial a la comida "chatarra"; ajustar a 32% el cobro de Impuesto Sobre la Renta a quienes tengan ingresos anuales superiores a los 750 mil pesos, y replantear el financiamiento del seguro de desempleo para que no recaiga en las cuotas del Infonavit, sino en el presupuesto federal.
Al cierre de la edición, estaban pendientes de votar cambios al régimen de los Repecos que tendrán 10 años para emigrar al sistema de Incorporación, además de un candado para que las empresas absorban la carga impositiva a las prestaciones salariales; además se exceptuó a la Cooperativa Pascual en el cobro de un peso a cada litro de refresco.
Ante la ausencia del PAN y de un sector del PRD en el pleno del Senado, los 61 legisladores del PRI y el PVEM ofrecieron negociar de la mano de la Secretaría de Hacienda con algunos legisladores perredistas para obtener los 65 votos necesarios para aprobar en lo particular la Miscelánea Fiscal.
Los cambios, a excepción del aumento al IEPS a la comida "chatarra", impactarán negativamente en los ingresos 2014; las pérdidas se restarán del Presupuesto de Egresos. También se acordó modificar el cobro de derechos en el sector minero para beneficiar a municipios; y en telecomunicaciones, Hacienda y el bloque del PRD pactaron un transitorio a la ley para establecer las condiciones en las que deberá funcionar el modelo de operación de las bandas 700 y 2.5 Mhz. de manera inmediata en un plazo no mayor de 60 días para garantizar la inmediata entrada de recursos.
ROCES
La bancada del PAN abandonó la sesión la madrugada de ayer miércoles, el coordinador del PAN en la Cámara Alta, Jorge Luis Preciado, confirmó que no regresarían al pleno, en rechazo a la Reforma Fiscal. Argumentó que cuando se votaba el impuesto a alimentos de mascotas y ya no había debate, optaron por salirse. Acusó que todo era avalado por PRI y PRD sin escuchar razones. Por ello, esperarán hasta hoy jueves a las 8:30 de la mañana a la reunión de comisiones en la que se discutirá la Ley de Ingresos, con el fin de oponerse a la deuda que pretende avalar el Gobierno federal.
Mientras Preciado declaraba que no tenía caso quedarse al debate, senadores priistas y perredistas ya llevaban varias horas reunidos en el hotel Le Meridien a una cuadra del Senado, en la Glorieta de Colón, con el secretario Videgaray ultimando los acuerdos para ir en conjunto y avalar la última parte de la reforma.
