El gobernador de California Jerry Brown firmó el martes una ley que prohíbe la llamada revancha pornográfica y castiga hasta con prisión a gente que coloque fotografías de sus exparejas desnudas después de rompimientos llenos de resentimiento.
La iniciativa 255 del Senado, la cual entra en efecto inmediatamente, convierte en delito colocar en Internet fotografías de desnudos identificables de alguien sin su consentimiento, con la intención de ocasionar angustia emocional o humillación. El castigo es de hasta seis meses de prisión y una multa de 1,000 dólares.
"Hasta ahora, no existía una herramienta para que las fuerzas judiciales protegieran a las víctimas" , dijo en un comunicado el autor del proyecto de ley.