Rumbo. En la imagen, pronunciamiento de la CETEG y de la CRAC, sobre el rumbo que tomará el movimiento de los maestros.
La asamblea estatal de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (CETEG) cerró el diálogo con el gobernador Ángel Aguirre Rivero, porque "ya no es un interlocutor válido" para solucionar el conflicto magisterial en la entidad.
Minervino Morán, uno de los líderes, dio a conocer los cinco puntos que acordó su asamblea, entre los que destacan que a partir del 10 de abril -aniversario luctuoso de Emiliano Zapata- el movimiento magisterial pasará a una etapa de lucha popular y se llamará "Movimiento Popular de Guerrero", así como realizar el próximo miércoles una gran movilización en la entidad. Ese mismo día se instalará una asamblea popular, como órgano de dirección, integrado por la Policía comunitaria, las comunidades, ejidatarios, normalistas, que definirá el rumbo del movimiento y las acciones a seguir.
La CETEG y las organizaciones comunitarias que los apoyan realizarán una megamovilización en esta capital, para exigir la liberación de su compañero Mario Durán Torres, detenido durante el desalojo de la Autopista del Sol, el 5 de abril pasado.
Como cuarto punto la asamblea determinó que no habrá más diálogo con el gobierno de Guerrero. Se advirtió que "sólo se retomará el diálogo si retoman nuestras propuestas para reformar la ley de educación de la entidad".
La asamblea estatal decidió que buscarán a los siete diputados locales que apoyaron su reforma para que la vuelvan a presentar al Congreso local, y advirtieron: "emplazamos a que la aprueben, (pues) de lo contrario habría desaparición de poderes en Guerrero".