Rafael Márquez Lugo falló un penal que pudo haberle dado el triunfo a las Chivas ante los Diablos. Chivas deja ir vivos a los Diablos
Contrastes. Alfredo Talavera, un diablo vestido de blanco, recibe los abrazos y felicitaciones. La pelota, lejos de su arco, tras atajar un penal, es el premio máximo. Para un arquero es como marcar un gol. Rafael Márquez Lugo, en cambio, se convierte en el hombre más solitario dentro del estadio Omnilife. Le quitó la pelota a dos compañeros para fallar. Chivas no encuentra la portería y se conforma apenas con un 0-0, como local, frente a Toluca.
En el Guadalajara aparecen signos de mejoría durante la primera parte. Los laterales, Miguel Ponce y Jesús Sánchez, entienden la vocación ofensiva que requiere el planteamiento propuesto por Juan Carlos Ortega y se convierten en volantes que ayudan en la generación. Chivas luce, durante algunos minutos, no tan "chato" como en otras ocasiones.
Así es como encuentra mayor claridad. Apenas al minuto 2, una pelota filtrada deja solo a Rafael Márquez Lugo, que encara al portero Alfredo Talavera y cuando lo ve salir, define por arriba. El esférico se va encima del marco.
Carlos Fierro es titular en el lugar que, por jerarquía, debería ser de Marco Fabián, quien ha sido condenado a la banca desde el episodio en el que descartó una oferta millonaria del futbol de Qatar.