Uno de los colaboradores más cercanos del ex presidente Alvaro Uribe recuperó la libertad el martes luego de permanecer casi 20 meses en prisión como presunto copartícipe de una red de espionaje contra investigadores y críticos del anterior gobierno, se informó oficialmente.
Dagoberto Hernández, magistrado del Tribunal Superior de Bogotá, en una audiencia pública, consideró que Bernardo Moreno, ex secretario general de la Presidencia durante el gobierno de Uribe (2002-2010), no representaba peligro para una eventual manipulación del proceso y las pruebas en el juicio que actualmente se adelanta en su contra en la Corte Suprema de Justicia.
Moreno, en consecuencia, seguirá vinculado a la investigación hasta tanto se produzca un fallo absolutorio o condenatorio sobre su caso, dijo telefónicamente a la AP su abogado, Jaime Granados. Fue detenido el 30 de julio de 2011 por su aparente responsabilidad en los delitos de concierto para delinquir agravado, abuso de función pública y violación ilícita de comunicaciones.
De ser hallado culpable podría ser condenado a no menos de seis años de cárcel.
Moreno, un economista de 53 años, siempre ha pregonado su inocencia.
En febrero de 2009 medios de comunicación locales dieron cuenta de que desde el Departamento Administrativo de Seguridad (DAS) --la policía secreta-- se les hacía seguimientos ilegales y se les interceptaba sus teléfonos a magistrados, periodistas, activistas y opositores del gobierno de Uribe.
Precisamente una ex directora del DAS, María del Pilar Hurtado, se asiló en Panamá en noviembre de 2010 con el argumento de que su vida corría peligro en Colombia para enfrentar el mismo proceso en el que está implicado Moreno.
Uribe siempre ha negado cualquier responsabilidad suya en las ilegales labores de espionaje y ha dicho que si éstas se dieron fueron por la mano de funcionarios corruptos del DAS.
Contra el ex jefe de Estado cursa actualmente una indagación preliminar en la Comisión de Acusación de la Cámara de Representantes, una célula legislativa que en Colombia investiga a los presidentes y ex presidentes de la República y que es blanco de críticas por su inoperancia.
Por los escándalos de corrupción, el presidente Juan Manuel Santos decidió desmontar el DAS en 2011.