Las personas que comen más de cuatro veces al día, pero lo hacen a un ritmo más lento, son menos proclives a la obesidad. INGIMAGE
En cuanto a lo que se refiere al tratamiento contra la obesidad se han emitido numerosas recomendaciones nutriológicas que buscan erradicar el problema, algunas de ellas limitan la ingesta diaria de alimentos, lo cual, según una investigación del Instituto de Ciencia y Tecnología de la Nutrición del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, no es de ayuda, pues lo ideal es comer más, pero más lento.
Dicha investigación siguió los casos de dos mil adolescentes de entre 13 y 18 años de edad con el objetivo de identificar los estilos de vida y nutrición que tienen influencia en la obesidad o delgadez.
Entre los muchos factores que influyen se encontraron como determinantes el momento en que se come, la composición, la cantidad de alimento y los macronutrientes, pero lo más sorpresivo fue un hallazgo relacionado al tiempo que se toma para comer y la cantidad de veces que se come.
Según resultados de la investigación aquellos adolescentes que consumen más de cuatro comidas al día, pero lo hacen a un ritmo lento tienen menores pliegues cutáneos y circunferencia de cintura.
Lo anterior, por supuesto, es considerando que el plan alimenticio es saludable, pues deben racionarse las porciones así como consumir alimentos de todos los grupos diseminados dentro de la dieta diaria.
^AC
