'Compartimos cicatrices con EU'
"Estados Unidos está cambiando y (los cineastas mexicanos) nos tenemos que volver parte de ese cambio", dice Diego Luna al referirse a la relación, de los últimos meses, que han sostenido directores mexicanos en ese país del norte.
Mientras Eugenio Derbez ingresó al mercado con No se aceptan devoluciones, siendo por ahora la producción en lengua española más taquillera; Omar Chaparro y Jaime Camil acaban de estrenar Amor a primera visa.
El mismo Luna acaba de rodar su nueva película Chávez, sobre el activista César Chávez, con talento latino, para su estreno en cines en el primer trimestre de 2014.
"Nuestras cicatrices son las de ellos (estadounidenses), simplemente dejamos que esta complicada frontera nos dividiera y alineara; pero ahora hay una comunidad que está buscando reconectar con Latinoamérica", señala.
Compartió la opinión de Guillermo del Toro, director de El laberinto del fauno, quien en su momento consideró al cine como el Esperanto (idioma hipotético que todos entienden) del mundo.
"El cine es un vehículo nada más, pero es para algo más profundo: la búsqueda de entendernos. Además, permite de alguna manera compartirnos y compartir experiencias", consideró.
El protagonista de Y tu mamá también y Rudo y cursi recibió el viernes el nombramiento de Huésped Distinguido de esta ciudad, debido a su aportación al cine.
Luna presentó, junto con su socio Pablo Cruz y Elena Fortes, directora general de Ambulante, la versión de este último festival para realizarse en California, Estados Unidos, el próximo año. Se realizará del 21 de septiembre al 4 de octubre, de manera gratuita.
Luna informó brevemente que el proyecto televisivo de Travesuras de la niña mala, basada en el libro homónimo del ganador del Premio Nobel, Mario Vargas Llosa, sigue. "Ahí está", dijo escuetamente.
LO NUEVO DE ROWE
Diego Luna no trae película como director o actor al Festival Internacional de Cine en Morelia, pero su empresa productora Canana se encuentra presente con Paraíso, de Mariana Chenillo y Manto acuifero, de Michael Rowe, ambas en competencia oficial.
Michael Rowe, ganador de la Cámara de Oro en Cannes por Año bisiesto, decidió ahora contar la historia de una niña que vive el proceso de divorcio de sus padres.
El director dijo que hizo el filme para mostrar la equivocación de los cánones cinematográficos que señalan a los niños como personajes sin conflictos internos.
"Es menospreciar su mundo interior y lo complejo de los seres humanos menores de edad, que sufren igual que los adultos", indicó.
La historia que contó con el diseño de producción de Eugenio Caballero, ganador del Oscar por El laberinto del fauno, tiene muchos matices personales pues él mismo es divorciado y tiene una hija.
Entregan premio a Amat Escalante
Los coqueteos que Hollywood le ha hecho desde hace meses han decaído, pero eso no es algo que importe a Amat Escalante.
El reciente ganador como Mejor Director en Cannes por Heli, dijo que él desea seguir contando historias en México, siendo Guanajuato sede de su próxima película.
"Aquí hay muchas cosas que contar todavía", apuntó.
Escalante, conocido por Los bastardos y Sangre, recibió el premio José Cuervo, consistente en dinero, el cual será utilizado para su próxima película, de la que se reserva detalles.
"Quizá sea algo no tan denso como Heli", dijo Escalante, cuyo cine se caracteriza por retratar de cierta manera la violencia de las personas.