En el diálogo con Estados Unidos, "hemos sido claros y puntuales", al expresar nuestra inconformidad con la visión de una frontera de muros y bardas, en vez de puentes, así como "al exigir una investigación por posibles actos de espionaje" al ahora presidente Enrique Peña Nieto, dijo el canciller José Antonio Meade.
Al comparecer ante el pleno del Senado, el canciller expuso el estado actual de la actividad diplomática mexicana en distintas latitudes y foros multinacionales, en particular en la defensa de los derechos de los mexicanos en Estados Unidos, con el resultado de aprobaciones de leyes pro-inmigrantes y sentencias judiciales que han impedido normas adversas a connacionales en la Unión Americana.
A la glosa del Informe presidencial asistió el canciller ante el pleno de la Cámara Alta, y en tres horas y 40 minutos, escuchó de las bancadas posicionamientos y preguntas sobre el desempeño de la Secretaría a su cargo en las relaciones con el mundo.
Primero en su exposición inicial y luego en comentarios a senadores del PRD (Manuel Camacho y Dolores Padierna), el canciller Meade dijo que "fuimos claros y puntuales al exigir una investigación y un deslinde de responsabilidades por posibles actos de espionaje" contra el entonces candidato Enrique Peña Nieto.
Ante el reproche de Padierna sobre el sentido de la reacción mexicana, cuando debieron pedirse explicaciones al Gobierno de Estados Unidos, el canciller consideró que por el contrario, esa solicitud "no cabe", sino que se investigue y se deslinden responsabilidades con base en el derecho, con las consecuencias de un hecho que ofende y molesta.
