Sin desperdicio. La modernización de los sistemas de riego significa un ahorro considerable en el volumen de agua.
Raúl Cuéllar fue director de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) de 1997 a 1999, periodo en el que lidió con un miniciclo agrícola donde se tuvieron que compactar áreas para aprovechar mejor el agua. Señaló que desde hace 15 años se ha tratado de promover programas de modernización de los sistemas de riego, lo que podría reducir el desperdicio, pero es poca la respuesta.
"Si hace 10 años se hubiera empezado a tecnificar, en estos momentos, los 600 millones de metros cúbicos serían excelentes porque equivaldrían a mil, ahorita se habla de un 40 a 50 por ciento de pérdidas, que serían minimizadas por la tecnificación", explicó Cuéllar, quien es consultor sobre temas del agua y asesor del Consejo Ciudadano por el Agua.
Dijo que la modernización de riegos en la región inició hace más de 30 años, pero han sido pocos los agricultores que han invertido en ello. Sin embargo, es un tema recurrente debido a la sequía cíclica que enfrenta La Laguna.
Raúl Cuéllar llegó a la Conagua en agosto de 1997, cuando ya prácticamente había transcurrido el ciclo de riego con un buen volumen de agua, pero la presa Lázaro Cárdenas que en 1998 la asignación fue de 350 millones de metros cúbicos (Mm3), lo que obligó a hacer múltiples acuerdos con los módulos para poder compactar las áreas y que se minimizaran las pérdidas en la distribución del agua.
"Desgraciadamente, la región se encuentra en un semidesierto donde la distribución del agua es muy variable, podemos tener uno o varios años buenos, luego algunos de baja disponibilidad, así ha sido toda la historia en La Laguna, años de abundancia y de sequía", explicó.
Luego de que en los últimos seis años se habían otorgado, como mínimo, 880 Mm3, en el 2013 se han autorizado 600 Mm3, lo que dejará a la presa con la mitad del volumen que tiene almacenado. Cuéllar señaló que hay disponibilidad de agua, pero es limitada, por lo que la Conagua busca tener una reserva mínima para los próximos ciclos, en caso de que no se presenten lluvias suficientes.
"Se trata de proteger el ciclo del año que viene, dependemos mucho de los ciclones en el Pacífico", indicó.
Dijo que las presas no se deben vaciar por completo, pues esto ocasionaría daños a la infraestructura.
