Prueba. La agresión a los guardias de seguridad queda evidente con un rastro de sangre al umbral del Palacio de Gobierno.
La Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) informó que ayer sábado consignó a un juez penal de Saltillo a José María Segura Gutiérrez, exmilitar que el jueves por la mañana atacó a balazos a cinco guardias del Palacio de Gobierno.
Con esto, el atacante, quien es originario de Palaú, municipio de Múzquiz, pero tenía su residencia en la colonia Mirasierra de Saltillo, ingresó a las instalaciones del Centro de Reinserción Social Varonil de esta misma ciudad, señaló la dependencia.
"Está acusado de causar lesiones gravísimas que ponen en peligro de muerte a tres oficiales. Asimismo, la PGJE se reserva el ejercicio de la acción penal por las lesiones de dos elementos, ya que sufrieron lesiones de disfunción parcial que pueden dejar secuelas", informó la Procuraduría.
Una de las pruebas que presentó la dependencia estatal son los videos obtenidos de las cámaras de vigilancia que hay en el Palacio de Gobierno, en la Plaza de Armas y en calles aledañas.
Informó que el estado de salud de los policías lesionados es bueno y se recuperan de las heridas.
Por otra parte, según el Código Penal de Coahuila, las sanciones que podría recibir son:
Artículo 341, Sanciones y figuras típicas de lesiones gravísimas. Se aplicará prisión de tres a doce años y multa, a quien infiera una lesión que: cause la pérdida definitiva de cualquier facultad o función orgánica que no se pueda sustituir fisiológicamente; cause la pérdida de algún órgano que, aún cuando su función se pueda sustituir fisiológicamente, la eventual pérdida del órgano sustituto motivaría la pérdida de la función o la muerte.
"Cause la pérdida de un miembro, cause una enfermedad segura o probablemente incurable y bien cause grave deformidad o incapacidad permanente para trabajar".
Artículo 342. Sanciones y figura típica de lesiones gravísimas que ponen en peligro de muerte. Se aplicará prisión de tres a siete años y multa, a quien infiera una lesión que concretamente ponga en peligro de muerte.
