Espero de todo corazón que el Día del Padre haya sido de muchas satisfacciones para los que, como su servidor, tenemos la dicha de serlo, y más aún para los que aunque no lo sean biológicamente asumen más que una responsabilidad, un compromiso de amor con un semejante.
En el deporte la figura del padre es fundamental, el apoyo que ofrece la presencia del padre es de gran utilidad cuando no ponemos en ellos nuestras expectativas y cuando ofrecemos comprensión, dando más énfasis al reconocimiento de su esfuerzo y mostrando interés y gusto por la actividad deportiva elegida por el hijo. Es importante que el hijo vea en el padre un modelo a seguir, tanto en la participación del padre en una disciplina deportiva como en su comportamiento como persona y como deportista, lo cual se verá reflejado en los niños, alcanza un alto valor no caer en el error común de criticar a nuestro entrenador o su entrenador, evitar insultos o actitudes desleales con los contrarios o con los mismos compañeros de equipo o con el árbitro o juez.
La actitud de los padres en la iniciación deportiva es sumamente importante para conseguir una práctica constante que permita al niño tener una vida sana, para promover el respeto a sus semejantes y a los mayores representados por la figura del entrenador, así mismo influirá la buena y sana costumbre de trabajar para conseguir objetivos planeados, a que el niño aprenda a tomar sus propias decisiones, en la etapa de la niñez orientadas, respetadas y no influenciadas por las del padre, así como a ejercer una disciplina de autocontrol, nuestras palabras, consejos u observaciones como padres deben ser reforzadas con una actitud congruente que permita al niño alcanzar compromisos no escritos como respeto, lealtad, esfuerzo y sacrificio sin que esto menoscabe su preparación escolar, sino que al contrario la fortalezca. Recuerde que "más vale un hijo, que una medalla".
En otro tema recibimos con mucho gusto la visita de Rodrigo "Pony" Ruiz a esta su tierra adoptiva, que con optimismo continúa en su preparación como director técnico, con una noche de plática amena y de agradables recuerdos acompañados de Joaquín Reyes, Gabriel Palmeros y don Ricardo Luna, ante la situación de no despedirse de las canchas en un partido oficial, surgió la idea de hacerlo en un partido a beneficio para alguna institución con integrantes del equipo campeón del 2001, esperamos que se concrete. Y en el tema taurino, con buena actuación de los aspirantes a novilleros se llevó a cabo en el Coliseo Centenario la tercera vacada del Circuito del Norte, resultando triunfador de la tarde el joven zacatecano Ángel Escobedo. Destacada actuación de Cayetano Delgado, Octavio de la Vega, y muy valiente y meritoria de Jorge Orona, de la Academia de la Cultura y las Artes Taurinas del Coliseo Centenario de Torreón. ¡Enhorabuena! En el ambiente del futbol local participamos la pena de la familia Yassin por el fallecimiento de don Jaime Yassin, ex jugador de los equipos Laguna y Torreón. ¡Hasta la próxima!
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