Espero que usted esté pasando unas bonitas fechas navideñas y que éstas vengan acompañadas de salud y alegría, pero también que estos días en que disminuyen las obligaciones laborales y estudiantiles no lo hayan alejado de la actividad física.
Aparte de la relajación propia de las fechas el clima frío es un factor de gran influencia en la disminución o el abandono de la actividad física, a continuación le ofrezco una serie de consideraciones si usted permanece activo en estas fechas en las que la relajación y los ricos alimentos tradicionales nos llaman.
La disminución de la temperatura y de la humedad ambiente provocan una serie de modificaciones fisiológicas que obligan concentrar el aporte sanguíneo en nuestros órganos internos, esto ocasiona que los grandes grupos musculares y las articulaciones sufran una notoria disminución de la temperatura, es por esto que antes de iniciar toda actividad física debemos dar un espacio de tiempo suficiente para la entrada en calor, la movilidad articular y el estiramiento, el mismo clima nos lleva a una disminución en el consumo de líquidos, que aunado a otros factores como el aumento en la viscosidad de los fluidos corporales, nos puede llevar a la aparición de lesiones musculares por disminución en la elasticidad de las fibras musculares por lo que se recomienda una entrada en calor más prolongada.
El aparato respiratorio ocupa un aspecto importante, debemos tomar en cuenta que la disminución de la humedad en el medio ambiente nos puede condicionar a enfermedades propias de la temporada, ¿Qué sucede con el aire que respiramos? El aire frío y seco que ingresa a nuestros pulmones por medio de la respiración se calienta secuestrando agua de nuestro aparato respiratorio, lo que ocasiona disminución en la humedad de las mucosas de los labios, boca, garganta, bronquios y alvéolos pulmonares, esos líquidos, en sí el agua, expulsados en forma de vaho cada vez que aspiramos, y si tomamos en cuenta que durante la actividad física aumenta nuestra frecuencia respiratoria tendremos por consecuencia una importante pérdida de líquidos y por lo tanto tendencia a una ligera deshidratación.
La humedad en el ambiente frío nos afecta seriamente, por lo que debemos elegir ropa que permita el desalojo de la humedad hacia el exterior a fin de mantener el cuerpo seco, en conclusión las medidas más recomendables son hidratarse, elegir la ropa adecuada y dar el tiempo suficiente para el calentamiento y estiramiento, los cítricos nos ayudarán a tener en mejores condiciones nuestras mucosas y si bien no evitan las enfermedades respiratorias si estaremos en mejores condiciones para que los efectos de la enfermedad sean menos graves y más llevaderos.
Espero de todo corazón que la paz, salud y alegría reinen en sus hogares, les deseo un estilo de vida saludable y ¡Feliz Navidad! ¡Hasta la próxima!
dr_jorgemgalvanz@hotmail.com