Gasto público. La principal crítica es la forma en que se usan los recursos disponibles.
El gasto en seguridad pública, salud, desarrollo social y educación pública, ha crecido exponencialmente en México en los últimos años, sin que los ciudadanos observen los beneficios, concluye el documento "¿Cómo gastar mejor para crecer?, estudio sobre gasto público frente a la inminente reforma fiscal".
El gasto en seguridad pública se duplicó entre 2006 y 2012, pero las muertes por homicidio pasaron de 10 mil 737 a 27 mil 213, señala el estudio elaborado por la Fundación Ethos.
De igual forma, entre 2000 y 2012, el gasto de la Secretaría de Salud aumentó cuatro veces, principalmente por el Seguro Popular, pero el gasto de bolsillo de los mexicanos es uno de los más altos de América Latina.
Y en educación es más contrastante la brecha entre recursos ejercidos y los resultados.
Entre las dependencias federales, la SEP es la que cuenta con más recursos, pues agrupa 13 por ciento del gasto total del Gobierno federal. Actualmente representa 1.64 por ciento del PIB, cuando en 2000 era 1.35 por ciento.
Y si se considera lo que ejercen estados y municipios, el gasto nacional en educación llegó en 2012 a 6.5 por ciento del PIB, muy similar a economías avanzadas. No obstante, sólo 49 por ciento de los estudiantes terminan sus estudios de secundaria en México, lo que se encuentra muy por debajo de EU, Chile, Alemania, Finlandia y Corea del Sur, aunque los gastos del sector público en educación como porcentaje del PIB son muy similares. Bajo este diagnóstico, el estudio propone que los recursos obtenidos por la reforma fiscal deben ejercerse con mayor transparencia y destinarse a sectores donde su impacto sea efectivo para mejorar la productividad y competitividad.