DE LA VIDA MISMA
Gracias.
Si es educado y agradecido, tiene que saber dar las gracias a la persona o personas que han tenido para usted detalles o actitudes especiales, especialmente cuando no medían compromisos y muy especialmente si éstos ocurren en momentos especiales de la vida, lo que hace más valiosa dicha actitud.
Por ello, vaya nuestro agradecimiento para una persona especial que es más que un amigo para nosotros. Don Rodolfo Sánchez Rivera, "Rudy".
No mediaba el compromiso de una vieja amistad o algún acto nuestro ni de él que nos atara a una amistad, esto surgió espontáneamente por las mañanas, temprano cuando disfrutábamos su compañía en San Isidro.
Nos gusta su forma alegre como llega todos los días, y su gran memoria para recordar mil poemas. Por ello, como hemos sido siempre amantes de la poesía y de las letras en general nos encanta picarle la cresta iniciando un verso, como probando su capacidad mental, y apenas empezamos el poema, de inmediato reacciona y toma la batuta para recordarlo completo.
El varón que tiene corazón de lis
Alma de querube, lengua celestial
El mínimo y dulce Francisco de Asís.
Y en seguida, emocionado "Rudy" continúa hasta terminar el tan famoso poema de Rubén Darío.
Tabernero.
¡Voy de paso!
Dame un vaso de tu vino.
Él feliz añade lo demás de la composición de Rubén C. Navarro.
Pero el detalle más hermoso lo tuvo el otro día al enterarse de algo que le platicaron sobre nuestra persona y nos regaló una colección de CD donde Manuel Bernal, El Declamador de América, como no habrá otro revive La Chacha Micaela, El Brindis del Bohemio, El Seminarista de los Ojos Negros y muchísimos más con los que nos deleitamos toda la familia en tardes frescas que se tornan agradables.
Gracias Rudy, mil gracias, y que El Señor lo cuide siempre.