Los Maestros
Inolvidables todos, cruzaron por nuestra vida ayudando a cambiarla para mejorarla.
Los primeros aparecieron en casa para poner las bases de cómo sería nuestro vivir, basado en el respeto al prójimo. Mamá y papá serían los mejores mentores de nuestro paso por los caminos de superación.
Seguirían vecinos y amigos como don Rafael Canales y Enriquillo Fernández hasta llegar a las aulas de la escuelita o jardín de niños de Lupe Villa, antes de pasar por las aulas de la Escuela Primaria Ramón López Velarde donde la figura estelar era Lolito, que lo mismo enseñaba en el aula que tomaba fotografías en su casa o visitaba a quienes fueron sus mejores alumnos, como fue el caso de mamá que siempre lo admiró.
Ya en Torreón surgiría la figura señorial, bondadosa y querida de Lolita Hernández, directora de la querida Escuela del Centenario donde terminamos la primaria bajo la batuta de René Gámez.
Después estaríamos en la prestigiada Escuela Bancaria y Mercantil del profesor Adalberto Ruiz Ríos donde las estrellas de la enseñanza eran Efraín Ruiz Ríos, las maestras Licha y Chelo Ramírez Camacho, el profesor Froto y Antonio Lee Cháirez.
Igualmente becados por la maestra Juanita Rawls, pasaríamos por las aulas del Instituto Latino Americano, donde aprendimos inglés y donde conocimos a la que sería la compañera de nuestra vida y tanto nos ha ayudado con la educación de los hijos y los quehaceres del vivir.
En la secundaria del Colegio COMEX cursamos también la preparatoria amparados por la beca que nos regaló su director, el querido maestro Óscar Valdés Vela.
Y la parte estelar de la vida estudiantil apareció en la Facultad de Derecho de la Universidad de Coahuila con grandes maestros como Antonio Alanís Ramírez que tanto nos ayudó a superarnos como personas y como funcionarios de esta casa en la que crecimos, también inolvidables, Joaquín del Río Jaime, Jorge Mario Cárdenas, Manuel García Peña, Juan José Álvarez Muñiz, Luis García Izaguirre, Alejandro Cepeda, Felipe Bretado Zul, José Luis Arredondo, Rodolfo Castro, Rosa María Hernández Solís, Pedro Reyes Landeros, Arnoldo Siller Cedillo, Jesús Sotomayor Garza, Carlos Chowell Zepeda, Octavio Orellana Wiarco, Javier Olazábal Sierra y Gilberto Serna Ramírez quien continúa a nuestro lado apoyándonos siempre.
A todos ellos nuestro eterno agradecimiento y que El Señor los ampare y cuide donde estén.