Inclúyanos.
Tómenos en cuenta.
También queremos cooperar.
Porque lo que van a hacer el próximo domingo 12, en Torreón, Gómez Palacio y Ciudad Lerdo, ojalá se extendiera por otros pueblos y ciudades, pero no por un día sino para siempre.
Es que es algo con lo que soñamos desde que hace muchos años llegamos para quedarnos en esta hermosa perla.
La fuimos viendo crecer, embellecerse, pero también perdiendo el control en su limpieza, en su aseo.
Así ocurrió con los lugares en su entorno, y este Diario puso entre sus metas, luchar por el mejoramiento en todos los aspectos de esta región.
Cómo olvidar a personas que de mutuo propio se han involucrado en el mejoramiento, embellecimiento y aseo de nuestra ciudad.
Como don Germán González Navarro que no hay un día de su vida, desde que lo conocemos que no lo dedique a servir, ya plantando un árbol, ayudando a personas sin recursos, etc.
Como don Ramón Iriarte Maisterrena que tantas obras ha donado o contribuido en el mejoramiento del ambiente.
Como un Jorge Serna Ramírez que tanto trabajó en las olvidadas colonias de la periferia, donde ayudado por los propios vecinos del lugar primero las aseó y luego fue sembrando canchas deportivas, que de día y de noche tenían bien ocupados a los jóvenes olvidando los malos caminos.
Con tales ejemplos un día apoyados por cuatro compañeros de la Redacción nos propusimos trabajar para el rescate del centro histórico que antes de terminar el Siglo XX se caía a pedazos, así como en la restauración y aseo de parques y áreas que se deterioraban con gran rapidez.
De esos cuatro, el que dirigía los trabajos periodísticos era Angelito Esparza Ramírez, inolvidable jefe de Redacción quien temprano nos abandonó por problemas con su salud, dejando tareas por completar. Estaba también Yolanda Ríos, la audaz reportera, y Ramoncito Sotomayor, incansable y compañero de tareas por diferentes partes del mundo.
Los tres siempre estuvieron a nuestro lado, luchando y apoyándonos y hasta protegiéndonos cuando se venían los problemas como aquella ocasión que EL SIGLO publicó el estado en que se encontraba un lugar donde se venden cosas para el hogar, especialmente alimentos.
No había amanecido del todo y ya teníamos frente a esta casa una verdadera, multitud de enojados comerciantes que querían la cabeza del funcionario en turno, y como siempre tuvimos la buena o mala costumbre de llegar antes de lo normal e irnos al último, tuvimos que salirle al toro, pero para entonces ya estábamos acompañándonos Angelito Yola y Ramoncito.
Varias horas duró el bloqueo que terminó cuando los tres sigleros aceptamos ir al día siguiente a discutir el tema en su domicilio donde sesionaban.
Así lo hicimos, y fue una reunión que se inició ríspida, pero con la ayuda del Señor terminó bien y hasta nos nacieron ahí amigos valiosos.
De estos antecedentes hay muchos más por ello pedimos ser incluidos en la gran campaña de Laguna, yo te quiero... Limpia.
Quizá ya no podamos andar recolectando basura o pintando tanta barda dañada por el grafiti, podríamos colaborar de otras formas.
