Proceso. El extitular de Finanzas de Tabasco José Saíz Pineda (blanco) custodiado por agentes ministeriales.
Tras terminar su diligencia en el Ministerio Público del fuero común, el exsecretario de Finanzas del Tabasco José Manuel Saíz Pineda quedó en manos de la Procuraduría General de la República (PGR), que cumplimentó una orden de aprehensión en su contra por el delito de peculado.
En el caso de la Procuraduría General de Justicia de Tabasco (PGJT), por el momento no encontraron evidencias para responsabilizarlo en algún delito como parte de la investigación, pues sólo se trató de cumplimentar una orden de presentación, informó Xavier Olea, abogado defensor de Saíz.
En tanto, fuentes federales indicaron que hay una ficha azul por parte de la Policía internacional, para localizar y presentar al exgobernador Andrés Granier.
Terminada la diligencia en la Procuraduría tabasqueña, policías ministeriales federales de la PGR lo detuvieron en el patio trasero de la dependencia, a las 22:05 horas.
De acuerdo con el abogado, los agentes lo llevaron detenido a la delegación estatal de la PGR y posiblemente será consignado ante un el juez segundo de Distrito, con sede en la ciudad Villahermosa.
El exsecretario de Finanzas de Tabasco José Manuel Saíz Pineda fue presentado ante el Ministerio Público local, por agentes de la PGR, como parte de la investigación en su contra por el presunto desvío de recursos por más de 2 mil 400 millones de pesos en el sexenio de Andrés Granier y el hallazgo de 88.5 millones de pesos en efectivo en la casa de su asistente.
El exsecretario de Finanzas fue presentado para que rindiera su declaración ministerial ante la fiscal Luz del Alba Pardo Cruz, que interrumpió por 30 minutos para ir al Instituto de Seguridad Social del Estado de Tabasco (ISSET), para después regresar ante la fiscal y continuar con la diligencia.
De acuerdo con la investigación de este diario, Saíz Pineda presuntamente encabezó una red de empresas para triangular recursos federales y estatales que extraían en efectivo de la secretaría de Finanzas, de fideicomisos que no se pagaron o programas federales de seguridad, educación y salud que no llegaron a concretarse.
El exfuncionario del exgobernador Andrés Granier fue asistido por el despacho de abogados encabezados por Xavier Olea y Ricardo Lecumberri, tras su arribo a las 14:50 horas a la sede del Ministerio Público en la Procuraduría General de Justicia de Tabasco (PGJT).
Ahí Saíz Pineda descendió de una Suburban blanca custodiada por agentes de la Policía Ministerial de la PGR, quienes de acuerdo con versiones extraoficiales viajaron por tierra con él desde Reynosa, Tamaulipas, donde fue detenido el sábado pasado por agentes migratorios de Estados Unidos y regresado a México.
El exfuncionario vestía una camisa celeste claro, pantalón de mezclilla y calzado negro. Consigo llevaba un reloj, unos lentes y un pañuelo color blanco.
A la distancia se le vio el rostro demacrado, mientras era conducido ante la fiscal Luz del Alba Pardo Cruz, quien le notificó de los hechos que se le señalan en la averiguación previa DGI-67/2013 en contra de varios exfuncionarios granieristas.
Durante cinco horas Saíz escuchó de la fiscal la lectura de la indagatoria que consta de más de 500 páginas con los documentales y testimonios que obran presuntamente en su contra por el desvío de recursos cuando fungió como titular de Finanzas y donde también se involucra al exgobernador Andrés Granier Melo y otros servidores públicos.
Antes de su arribo al Ministerio Público, la PGJT reforzó la seguridad en sus instalaciones con elementos del Grupo de Operaciones Especiales (GOPES), armados con fusiles AR-15 y con los rostros cubiertos con pasamontañas.
Desde su detención el sábado pasado en el municipio de Reynosa, Tamaulipas, por agentes migratorios de Estados Unidos, por problemas con su visa, y una orden de presentación y localización girada por la Policía Internacional, sus abogados desconocían su paradero, e incluso lo estuvieron esperando en el aeropuerto de esta capital.
Al mediodía de ayer domingo, los abogados tenían la versión que su cliente llegaría en un vuelo privado procedente de Toluca, Estado de México, al hangar de gobierno de la terminal aérea de esta capital.
Hasta ese lugar llegaron agentes ministeriales quienes realizaron un operativo para trasladar a Saíz Pineda a la Procuraduría local, en camionetas custodiadas por elementos de la corporación, quienes fueron seguidos por los abogados, pero se trató de una estrategia distractora.
