Dos sacerdotes y una persona más fueron detenidos tras el robo de las joyas y adornos de la virgen de Copacabana, patrona de los bolivianos, informó el jueves la fiscalía, y el presidente Evo Morales expresó su preocupación por estos robos.
La fiscal encargada del caso, Monica Limachi, confirmó a la AP que los tres fueron detenidos con fines investigativos en torno al hurto de las 18 piezas de oro de la virgen tallada en 1580 por el indígena Tito Yupanqui que está en proceso de canonización.
Los dos sacerdotes pertenecen a la orden de los Franciscanos. La policía no quiso adelantar ningún informe sobre la aprehensión.
Morales, en un acto público, expresó su preocupación por el robo a la Virgen y a iglesias al sur del país.
"Pedimos un castigo severo para que no se roben los bienes de la iglesia católica", agregó.
La virgen de Copacabana, que en 1925 fue declarada "Reina de la Nación", está en la ribera del Lago Titicaca. El lunes les fueron robadas sus joyas, 10 anillos de oro, las coronas, de la virgen y la del Niño Dios que tiene en sus brazos, el cetro, la canastilla, entre otros objetos. La policía y la fiscalía no informaron sobre el valor de los objetos robados.
