FESTEJOS. Las danzas son parte importante de la celebración de San Judas Tadeo.
Fieles a San Judas Tadeo unen sus corazones por devoción.
Más que cumplir una manda, la mayoría de los fieles católicos realiza la reliquia a San Judas Tadeo este 28 de octubre como una muestra de su fe y agradecimiento por interceder ante Dios por ellos y ayudarlos a cumplir sus peticiones de prosperidad, protección y salud, entre otros.
Desde el 25 de octubre los fieles comenzaron a realizar las reliquias y danzas al Santo, compartiendo con sus vecinos, familiares y amigos el tradicional asado y las siete sopas que componen la reliquia.
Tradición que pasa de generación en generación
Desde muy pequeña Linda comenzó a ser una fiel devota de San Judas, fue su madrina, quien le inculcó pedirle al Santo por todas sus necesidades y al ver que éstas se resolvían, la fe y agradecimiento de Linda se hicieron más grandes, hasta la fecha.
El ser agradecida por los favores recibidos también le fue inculcado a Linda por parte de su bisabuelita, quien era fiel devota de San José, al cual celebraba en el mes de marzo.
"La reliquia que hacía mi bisabuelita era en grande, ella hacía una cantidad impresionante de mole, además de que le llevaba a San José un conjunto norteño y su danza, durante todo el día", dijo.
No fue hasta el año 2000 que Linda y su esposo decidieron seguir con la tradición de familia y realizarle una reliquia a San Juditas.
"Al ver que cada años éramos bendecidos, mi esposo y yo decidimos compartir con los demás lo mucho o poco que teníamos y fue así como decidimos comenzar a realizarle las reliquias a San Juditas", apuntó.
Conforme al paso de los años la familia de ambos comenzaron a contribuirles con dinero, alimentos o artículos para la realización de la reliquia, por lo que ahora se ha convertido en una celebración de unión familiar.
"Los familiares de mi esposo y los míos comenzaron a traernos donativos para realizar la reliquia, unos con efectivo, otros poniendo sopas, carne, el chile, desechables y demás, por lo que ahora la reliquia se ha hecho un acontecimiento de agradecimiento familiar", dijo Linda.
Asegura que ella es sólo una coordinadora de la reliquia, ya qu" San Judas es quien provee todo lo necesario para realizar la reliquia".
"Yo lo que le digo a San Juditas, prácticamente tu haces tu reliquia, porque la verdad yo sólo soy la coordinadora del evento y él se encarga de proveer para que no falte nada para celebrarlo en su día", comentó emocionada.
Es el último domingo del mes de octubre que Linda coloca un toldo afuera de su casa, el cual consigue prestado, además de que los danzantes sólo le piden para el transporte, haciendo prácticamente gratuita su participación en la reliquia.
Lo que ella comparte con sus vecinos es el tradicional asado con sopa, además de un delicioso postre que puede variar cada año.
"La enseñanza de Jesús es dar y compartir, y para mi lo que es la realización de las reliquias es compartir con quien no conoces los alimentos", concluyó.
Llegan de San Pedro compartiendo su devoción a San 'Juditas'
Tras compartir dos años la reliquia con los presos, ahora la familia Martínez Mason, procedente de San Pedro, Coahuila, desde hace 18 años comparte la reliquia con sus vecinos de la colonia en la que viven en Torreón, como muestra de gratitud a San Judas Tadeo por proveerles de un techo y dinero, cuando lo perdieron todo.
"Nosotros llegamos a vivir aquí a Torreón sin nada, porque la tienda que tenía mi esposo en San Pedro quebró cuando el ferrocarril dejó de pasar luego de la visita del expresidente Carlos Salinas de Gortari", dijo Magdalena.
Fue tras estos lamentables hechos que Magdalena y su esposo Mario decidieron buscar una mejor oportunidad y llegaron a Torreón, donde comenzaron desde abajo y, gracias a la ayuda de San Judas lograron sostenerse, hasta lograr levantar la tiendita que ahora tienen.
"Al ver la devoción de nuestros vecinos por San Judas y sentir su mano en cada momento difícil mi esposo quiso agradecerle haciéndole la reliquia y hasta la fecha estamos realizándola cada año", comentó Magdalena.
Es el día primero de noviembre que Magdalena le ofrecer la reliquia a San Juditas, ya que busca prolongar las fiestas y no empalmarse con sus vecinas que al igual que ella son fieles de San Judas.
"No me gusta empalmarme con mis vecinas, por eso prefiero hacerla hasta el día primero, por que también pienso en quienes no alcanzan y quienes no tiene de comer y así si ya le dio mi vecina y luego yo, pues ya comieron dos días," comentó Magdalena.
Actualmente Magdalena con ayuda de sus dos hijas Flor y Karina, prepara más de 50 kilos de carne, y alrededor de 25 kilos de sopas, que reparte entre 700 gentes de su colonia y desconocidos que llegan de paso.
En estos 20 años que tenemos preparando la reliquia para San Judas nunca nos ha faltado el alimento, la salud y un techo donde vivir y por eso estamos muy agradecidos y le rezamos y festejamos a San Juditas cada año.
"Nunca pierdan la fe en lo que sea que crean, porque es lo que los va ayudar a salir adelante cuando más lo necesiten; la fe y devoción es lo que mueve los corazones", finalizó emocionada Magdalena.
Agradecen a San Judas por todos los favores recibidos en el año.
Con 10 años viviendo en Torreón, pero originaria de Villa Juárez, Durango, Angélica Martínez y su esposo Erasmo Blanco desde hace siete años le han realizado su reliquia a San Judas Tadeo como muestra de agradecimiento por todas los favores que les ha cumplido.
"San Juditas nos ha ayudado con situaciones económicas, de salud y de fortaleza y estamos seguros que sin su ayuda no estaríamos aquí", comentó Angélica.
Su devoción comenzó cuando su esposo y ella le pidieron al patrono de los casos difíciles, que le otorgara a Erasmo un espacio para trabajar, el cual nunca les ha faltado.
"Nosotros le pedimos que nos diera un local para que trabajara mi esposo y San Juditas nos lo dio, y aunque muchas veces nos han corrido, nunca nos ha faltado otro lugar para que mi esposo trabaje, es cuestión de días para que encuentre otro taller y se ponga a trabajar", comentó Angélica.
Cada año la familia Blanco Martínez integrada por cuatro hijos, una nuera, un nieto, además de Angélica y Erasmo, realizan dos reliquias en honor a San Judas, la primera es un día antes del gran evento, este día matan un marrano de más de 100 kilos, del cual hacen carnitas y chicharrones, los cuales comparten con sus familiares más cercanos.
"Nosotros empezamos todo los días antes del día de San Judas, primero matamos un marrano, siempre de más de 100 kilos, de este animalito hacemos carnitas y chicharrones para toda la familia", dijo.
Es por la noche y parte de la madrugada que todos los integrantes de la familia participan en la elaboración del tradicional asado para el que cocinan más de 100 kilos de carne, cinco kilos de chile, además de la elaboración de las siete sopas que en total son seis cajas de cada sopa y ocho kilos de arroz.
"El día que hacemos las carnitas con la familia ese mismo día comenzamos con la preparación del asado y de las sopas, para que participen todos nuestros familiares, por lo regular no dormimos ese día, y aunque pareciera cansado, nosotros lo hacemos con mucho gusto para San Juditas", comentó Angélica.
El día de la reliquia, las actividades en casa comienzan desde temprana hora, ya que trasladan todo preparado al taller en donde actualmente trabaja Erasmo, mejor conocido entre sus amigos y familiares como "nene". Luego de acomodar el altar con flores, la danza comienza desde las 12 del mediodía y finaliza a las 4 de la tarde, extendiéndose hasta las 10 de la noche los rezos para San Judas en su día.
"Nosotros lo hacemos con mucha fe y gusto y es muy importante que nuestra familia este con nosotros para compartir este momento de agradecimiento, por que es poco el tiempo que nos reunimos con ellos y aprovechamos para estar en familia" dijo Angélica.
Finalmente Angélica comentó que su devoción a San Judas continuará por el tiempo que Dios le permita estar viva, como una muestra de agradecimiento hacia el.
"Mi devoción hacia San Juditas es porque me cumple todos los favores que le pido, por eso para mi hacerle una reliquia cada año es como una muestra de agradecimiento por todo lo que le pedimos durante el año y nos cumple; como decía mi suegra, que en paz descanse, si se le hace una vez la reliquia hay que hacérsela siempre para que no se te olvide lo que hizo por ti ", finalizó Angélica.