Ardiente. Fotografía facilitada por la Agencia Espacial Europea (ESA), de la corona solar.
La Agencia Espacial Europea (ESA) difundió ayer las fotografías más recientes de la corona solar captadas por el satélite Proba-2 que muestran lo que esa organización calificó como Las fotografías las tomó un satélite que estudia el origen de estallidos, proyecciones de masa solar y erupciones al espacio. Las imágenes fueron tomadas gracias a los dos monitores instalados en ese satélite de observación solar que lleva en órbita desde noviembre de 2009 como plataforma de investigación científica.
Uno de esos monitores es el SWAP, un observador solar que emplea un sistema de detección de pixeles activos y procesamiento de imagen, es decir, un pequeño telescopio que captura la longitud de onda correspondiente a temperaturas que rondan el millón de grados.
Estas imágenes se utilizan para estudiar el origen de fenómenos como los estallidos solares o proyecciones de masa solar, que consisten en erupciones masivas de material al espacio, precisó la ESA en un comunicado.
Los fenómenos que se analizan son elementos que afectan a la meteorología espacial que a su vez repercute fuertemente en las condiciones ambientales de la magnetosfera, la ionosfera y la termosfera terrestres.
"La climatología espacial no sólo tiene interés académico. En la actualidad de la economía europea, muchos sectores se ven potencialmente afectados por ello, desde las telecomunicaciones basadas en tecnología espacial, la difusión audiovisual los servicios meteorológicos y la navegación marítima hasta la distribución de comunicaciones terrestres", precisó la ESA.
IMÁGENES NUNCA VISTAS
En tanto, loa NASA está observando el Sol desde una aproximación sin precedente gracias a un nuevo telescopio.
La nave espacial IRIS, lanzada hace un mes, ya está suministrando imágenes detalladas.
La puerta del telescopio se abrió la semana pasada y empezó a observar la atmósfera inferior del Sol en detalle nunca visto.