¿Qué es la historia? Un gran listado de fechas y lugares dignos de la memoria de las colectividades que son y deben ser conocidos por las personas, un continuo de acontecimientos "importantes" para los hombres y las naciones.
Quizá ver la historia de una forma individual favorezca verla como algo cercano que está patente en la vida diaria, porque la historia de los pueblos está formada por la historia de los individuos que forjaron dicho paso por el tiempo. Bajo esta premisa, resulta interesante ver cómo somos fruto de situaciones pasadas y que pese a ello no estamos determinados por las mencionadas disposiciones previas.
Lo anterior nos lleva a ver el paso del tiempo (en especial el presente) más que como una sucesión de acontecimientos, como una base donde se construye lo que habrá en el mañana.
El impresionismo es un movimiento pictórico ampliamente conocido, no sólo por la belleza de sus obras, también porque rompió con parámetros y dogmas firmemente establecidos por las autoridades del arte de la época. Monet, Renoir o Cassatt son autores que se encuentran dentro de esta nueva visión. Pero el impresionismo como tal provino de la generación espontánea o por iluminación divina. Se conjuntaron muchos factores unos más visibles que otros para que tomara forma un movimiento que trajo un claro avance de la técnica y la perspectiva.
Situándonos en los antecedentes, en la perspectiva presente reinaba la incursión del color y el cambio de temas, el romanticismo fue un previo de ambos factores. Pintores como William Turner dieron algo que va más allá de los indicios de una nueva corriente.
Su pintura que corresponde a un estilo más brillante, en primer lugar porque es él quien comienza a utilizar el "betún" una especie de fondo claro que le da a los cuadros mayor vivacidad y claridad en los colores. Además de que su pincela es más libre lo que da la sensación ligera dentro del cuadro. Estos dos puntos dan fe de que la necesidad de un punto de vista es indispensable para que las cosas sean vistas como algo que cambia se transforma.
En palabras de Turner "No lo pinté para que fuera entendido, sino porque quería mostrar cómo luce semejante espectáculo" resume la antesala de la ideología de atrapar un momento de esa historia de las personas a través del tiempo, en un cuadro. La forma de pensar va creando por sí misma las acciones y dicha ideología está plasmada de bella manera en el cuadro de "Crepúsculo sobre un lago" (1840), en la cual los colores y las desdibujadas figuras se funden en un verdadero mar de movimiento, los brillantes colores acres y amarillos dan una apariencia de brisa sobre la tela mientras que la profundidad es apreciada por el naranja. Si los futuros impresionistas encontraron en estos cuadros inspiración suficiente para dejar de seguir los protocolos establecidos y esperados, no es de sorprender que el motivo estuviera orientado por la innovación y la maestría del técnica con la que Turner pinta, porque pese a que presenta imágenes desdibujadas, tiene paisajes que denotan su habilidad con el pincel "El paso de San Gotardo" un rocoso acantilado con un pequeño peligroso camino. La pericia de Turner con la pintura podría decirse que rebasa su tiempo, ya que hace de sus cuadros un deleite percibir los detalles que dan forma a una marea de color.
Por ello, si su forma de pensar hubiera sido diferente o hubiera trabajado de un modo distinto, ¿habríamos conocido como lo que reconocemos por impresionismo hoy en día? Y a su vez ¿hubiesen surgido los movimientos posteriores del modo como se dieron? Por lo cual la gran importancia de ver los detalles específicos de cada periodo histórico, porque ahí están las pistas de lo que encontraremos a futuro. Sería interesante plantearnos qué es lo que estamos viendo ahora, para imaginar qué vendrá después poniéndonos en el lugar de los contemporáneos de Turner o Monet y poder admirarnos lo que se logra con el paso del tiempo.