El pasado viernes 1° de marzo dio inicio la tercera edición del Clásico Mundial de Beisbol, que habrá de concluir el próximo día 19. El primero de estos torneos fue en 2006 y el segundo en 2009, siempre en marzo. Originalmente se tuvo la idea de celebrarlos cada tres años. Luego se modificó para que se efectúe cada cuatro. El cambio fue acertado, toda vez que las Olimpiadas y demás justas deportivas mundiales son también cuatrianuales.
Con tal motivo, resulta oportuno traer a cuento un estudio referido hace siete años por la revista británica New Scientist. Según ésta "el beisbol sobrepasó al futbol como el deporte más emocionante de la última década porque los resultados inesperados son más probables". Para sustentarlo, la mencionada publicación precisa que se llevó a cabo el análisis de 300 mil resultados de enfrentamientos en cinco deportes (a saber: beisbol, futbol soccer, jockey, basquetbol y futbol americano) a lo largo de un siglo.
El análisis se efectuó en el Laboratorio Nacional de Los Álamos, Nuevo México, donde los investigadores estudiaron las principales ligas estadounidenses en cuatro deportes: beisbol, jockey, basquetbol y americano. Por lo que hace al soccer, la información, fue de la división de élite del futbol inglés. Para los analistas la clave de la emoción deportiva está en el desenlace de los encuentros. En el beisbol, no sujetó su juego a tiempos fatales, al final puede suceder -y de hecho así ocurre- cualquier cosa.
Como en los dos anteriores, este tercer Clásico Mundial se ha programado para desarrollarse por etapas. De entrada, una docena de países -incluido México- tuvo asegurada su participación. Adicionalmente, entre septiembre y noviembre del año pasado, otras dieciséis naciones compitieron por cuatro boletos más disponibles para intervenir en la primera ronda eliminatoria, de las dos que comprende el Clásico. Además, obviamente, de la ronda de campeonato, que tendrá lugar con la participación de los últimos cuatro finalistas en San Francisco, California, del 17 al 19 del presente marzo.
En la etapa eliminatoria preliminar del año pasado ganaron su derecho a intervenir en el Clásico los siguientes cuatro países: España, Canadá, Brasil y China Taipei. Se completaron así los 16. En el camino quedaron, lamentablemente, naciones donde el beisbol es pasión como Panamá, Nicaragua y -de alguna manera también- Colombia. El boleto que éstos se disputaron lo ganó ¡¡Brasil!!
Para la primera ronda eliminatoria se programaron cuatro sedes. Dos en Asia (en Japón y China Taipei) y dos en América (Puerto Rico y Phoenix, Arizona), con la participación de cuatro equipos por sede, de los que sólo pasarían dos a la siguiente ronda. Las de Asia terminaron primero. La gran sorpresa en Oriente fue la eliminación desde la primera ronda de Corea del Sur, sin duda una gran potencia beisbolera y subcampeón del Clásico Mundial anterior.
Las sedes de América iniciaron sus trabajos al concluir las de Asia. A México le tocó jugar en Phoenix para competir por dos boletos a la siguiente etapa, con EUA, Canadá e Italia.
En San Juan, Puerto Rico, tocó jugar al llamado grupo de la muerte, porque además de España participaron aquí nada menos que Puerto Rico, Venezuela y República Dominicana. La segunda ronda de los dos grupos de América se efectúa del 12 al 16 de marzo en Miami. La ronda de campeonato, con los cuatro finalistas, dos de los que participaron en Asia y dos de los que juegan en América, será como ya se dijo en San Francisco.
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