Emotiva fue la misa oficiada ayer por el sacerdote Víctor Manuel Gómez Hernández, a la cual asistió un buen número de aficionados.
Emotiva fue la misa oficiada por el sacerdote Víctor Manuel Gómez Hernández, quien pidió a los asistentes a la misma que hicieran una oración por cada jugador para que Dios los llenara de fortaleza en el partido que iban a sostener horas después.
La misa dio inicio a las 18:00 horas con la asistencia de miembros de la Porra La Tribu, dirigida por Magda Tovar Salazar, habiendo participado aficionados de diferentes partes de la Comarca, entre ellos la familia de Irene de la Paz Montoya, que vinieron desde Viesca, Coahuila, a apoyar a los Guerreros.
El padre Víctor Manuel Gómez Hernández explicó que el tema central de su homilía fue la esperanza, pero también la actitud de la responsabilidad y el compromiso, pero sobre todo la esperanza.
"El Santos Laguna ha sido siempre una esperanza, es un equipo que genera mucha vitalidad, unidad, una sinergia muy fuerte, que une a la Comarca Lagunera'', puntualizó.
Dándole ese sentido en la fe, el equipo nos convoca a que sigamos siendo creyentes. La intención de la misa no fue la magia, sino la actitud de agradecer a Dios, primero porque el equipo calificó a la Liguilla, segundo, pasó a la semifinal y se le debe apoyar.
"La misa fue en el Día del Señor, y qué mejor que la alegría del futbol, el cual convoca a la familia, y si Dios nos lo permite, por qué no gozar de esto a través del deporte'', puntualizó.
El sacerdote pidió a todos los aficionados que disfrutaran sanamente del partido, que sea una verdadera fiesta de la Liguilla.
La misa concluyó con un mensaje de Magda Tovar Salazar, dirigente de La Tribu, quien pidió a los asistentes al acto una oración por el equipo verdiblanco.
Finalmente todos los presentes entonaron con las manos enlazadas una porra ¡Santos, Santos, Santos!.