Concurrida. Con un Teatro Isauro Martínez lleno, se realizó anoche el homenaje póstumo y la presentación del libro de Don Antonio Irazoqui y de Juambelz 'Nau-yaca. De lo que El Siglo informó'.
Familiares, amigos, lectores, colegas y la familia siglera, que durante tantos años ayudó a integrar, fueron parte anoche del emotivo homenaje realizado a Don Antonio Irazoqui y de Juambelz, de quien se presentó además una recopilación con una parte de su trabajo periodístico, bajo el título "Nau-yaca. De lo que El Siglo informó".
Elvia Santa Cruz Polendo, abrió la presentación del libro recordando la presencia humana y atenta de Don Antonio Irazoqui, un promotor de la gramática y la excelencia de estilo en el periódico. La catedrática hizo hincapié en el ser humano inteligente que escribió los más importantes sucesos de la segunda mitad del Siglo XX, a través de su columna diaria Nau-yaca.
"Es un retrato de los problemas y las vicisitudes de La Laguna a través de la pluma de Don Antonio, que día a día fueron registrados con una gran dosis de humor, sarcasmo y sátira, ejemplo, además, de fino humor".
La escritora Adela Celorio, colaboradora de "El Siglo de Torreón", recordó durante su participación, que todos los seres humanos parten, sin embargo, de muchos queda su obra. También ofreció una reflexión sobre el hombre dedicado a su familia e hijos, y destacó de Don Antonio, su paso por El Siglo, su ironía como almendra de la inteligencia y "esa mezcla de sabiduría alquimista con lo mordaz de Nau-yaca".
"Don Antonio nos dio la oportunidad de reírnos, pero también de reflexionar sobre esos pobres diablos que nos gobiernan", dijo la escritora, que leyó algunas de las columnas.
El magistrado Germán Froto y Madariaga, además de destacar el enorme trabajo editorial del libro, recordó a su amigo con anécdotas que señalaban la capacidad irónica del periodista. Un hombre que destacó por su trabajo y por su sinceridad, siempre distinguiendo entre los amigos y conocidos, un hombre que vivió momento a momento.
Enrique Irazoqui, director de operaciones de esta Casa Editora, además de recordar el trabajo periodístico de su padre, recalcó el gusto que tenía por involucrarse a fondo en todas las áreas del periódico. Asimismo, dio lectura al artículo que don Antonio publicó a propósito del 50 aniversario del periódico, en su cambio industrial.
Al final de la presentación, se proyectó una reseña con testimonios de quienes compartieron experiencias laborales, anecdóticas y periodísticas con el licenciado Antonio Irazoqui y de Juambelz.
