Preparados. Rebeldes sirios anunciaron que ignorarán el acuerdo ruso estadounidense.
Estados Unidos y Rusia acordaron dar a Siria una semana para hacer públicos sus arsenales de armas químicas y hasta mediados de 2014 para destruirlos, anunciaron en rueda de prensa en Ginebra el secretario estadounidense de Estado, John Kerry, y el ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov.
Además, Siria tiene que permitir el acceso de inspectores internacionales de inmediato a todos los arsenales. El presidente de EU, Barack Obama, calificó el acuerdo como "un importante paso" hacia adelante, al ofrecer la posibilidad de destruir los agentes químicos de combate de forma transparente, rápida y vigilada. "La comunidad internacional espera que el régimen de Bashar al-Assad cumpla con sus compromisos", agregó Obama, quien sin embargo amenazó de nuevo con una intervención militar si la cúpula siria no cumple con lo acordado.
El Pentágono dijo que las fuerzas militares de EU todavía se encuentran posicionadas para un posible ataque militar contra Siria, a pesar del acuerdo.
El Ejército Libre de Siria rechazó el acuerdo cerrado entre Rusia y EU y anunció que seguirá su lucha contra Al-Assad. "La iniciativa ruso-estadounidense no nos preocupa. Solamente buscan ganar tiempo", afirmó Salim Idriss, jefe del comando del grupo rebelde. "Ignoraremos por completo esta iniciativa y seguiremos luchando para acabar con el régimen", señaló en una conferencia de prensa desde Estambul.
En cambio, el secretario general de Naciones Unidas (ONU), Ban Ki- moon, saludó el acuerdo alcanzado entre Rusia y EU, en tanto que el secretario general de OTAN, Anders Fogh Rasmussen, lo calificó como un paso hacia la paz.
Los senadores republicanos John McCain y Lindsey Graham criticaron el acuerdo, señalando que Damasco lo utilizará para engañar al mundo. Los dos republicanos manifestaron su preocupación en una declaración conjunta, comparando el acuerdo con "el inicio de un callejón diplomático sin salida" al que está siendo llevada la administración Obama por el presidente Al-Assad y el jefe de Estado ruso Vladimir Putin.
El acuerdo no tendrá sentido si la resolución del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas no es adoptada bajo el Capítulo VII de la Carta de la ONU, que amenaza con el uso de la fuerza, en caso que el régimen de Al- Assad no cumpla, indicaron.
"Al-Assad usará los meses y meses concedidos para demorar y decepcionar al mundo, usando cada artimaña del manual de (el fallecido expresidente iraquí) Saddam Hussein", afirmó el comunicado.