Torrado dice que es tiempo de pensar bien las cosas en la Selección. En el Tri es tiempo de autoanálisis
Desde hace 14 años Gerardo Torrado viste la playera de la Selección Nacional. El contención ha vivido de todo: Grandes triunfos, grandes derrotas, momentos de brillantez y de crisis.
La situación del Tri de cara al Mundial de 2014, no es nueva para él. La sufrió en el 2002, cuando Javier Aguirre tuvo que entrar al rescate y la vivió en el 2010, cuando el mismo Vasco volvió para hacer resurgir el barco.
Hoy, que en el hexagonal se viven momentos de apremio, la voz del líder se levanta, y aconseja: "Es tiempo de un autoanálisis".
Tres veces mundialista y con 141 juegos como seleccionado, Torrado pide calma, pero sobre todo mucha autocrítica.
"No estamos contentos -dice mirando fijamente a los ojos. Es que lo ideal sería estar más arriba, tener las cosas más claras", confiesa.
La "empatitis" que ha contagiado al Tri en este hexagonal (cuatro igualadas por una sola victoria), es el principal mal. "Se ha empatado mucho, de punto en punto no vamos a llegar lejos".
¿Cuál es la solución? Todo se apuntaría a lo que haga el técnico nacional José Manuel de la Torre, pero la experiencia de Torrado pide algo más.
"Es momento de hacer una autocrítica, un autoanálisis. Hay que pensar bien, muy bien en qué podemos mejorar y sobre todo qué es lo que no estamos haciendo tan bien", explica.
Mas ese autoanálisis deberá hacerse de forma veloz, porque no hay mucho tiempo. El próximo martes Costa Rica vendrá con la idea de lograr otro "Aztecazo", como aquel que logró rumbo al Mundial de Japón-Corea, allá en el 2002.
Pero Gerardo Torrado tiene otra idea. "Hay que retomar el camino de la victoria. Sólo nos sirven los tres puntos, no más, es hora de escalar en grande".
Si los partidos contra Panamá y Jamaica fueron duros, "clásicos de eliminatoria", dice el contención, contra los ticos será muy parecido. "Claro, será trabado, como lo fueron los dos pasados, a los que salimos con la idea de ganar".
PUNTOS
Suma la Selección Mexicana y es tercer lugar del hexagonal final de la Concacaf.