Estamos terminando el año y así la administración 2010-2013 del priista Eduardo Olmos; y para los que venimos siguiendo lo que está anunciando el candidato electo Miguel Ángel Riquelme Solís y sus colaboradores principales, es confortable ver que tienen muchas ganas y deseos de hacer las cosas bien, sobre todo anunciar los montos destinados y los objetivos trazados en cada acción. Hacer público a los ciudadanos sus estrategias de trabajo, presupuestos y demás decisiones no es una opción, es ya una obligación, lo afirmo porque es una de las pocas maneras de hacer creer a un ciudadano que esta vez se obrará bien, sino al menos no sentirnos sus "tontos" con tantas explicaciones grises o desfalcos incomprobables en el presupuesto público. Hoy los ciudadanos queremos estar informados, en algunas ocasiones hasta involucrados, y no por querer participar en la política, hay muchos apartidistas, pero si interesados en hacer crecer nuestra ciudad, nuestras causas sociales y demás actividades en solidaridad.
Cito unas palabras de un escritor al que últimamente he seguido, Jorge Cepeda Patterson "A los políticos, como a los autores de los libros o a los artistas, no hay que evaluarlos por su persona, sino por sus resultados. Hay funcionarios cálidos y simpáticos, cuyas gestiones resultan un desastre; y viceversa, libros maravillosos que se nos caen de las manos cuando conocemos al autor, quien resulta un verdadero hígado".
Se tienen buenas expectativas para Torreón con el equipo que se va conformando con el Ing. Riquelme a la cabeza, sin embargo, no pueden darse el lujo de hacer mal las cosas o a la carrera por cumplir los famosos "100 primeros días", y esto no por ser un aguafiestas, sino porque como en cualquier maratón, la administración de la energía y el plus en ciertas etapas son clave para lograr llegar en el tiempo deseado.
Sabemos bien todos los ciudadanos, de todos los estratos, apartidistas, activistas y demás que tres malas administraciones serían catastróficas para Torreón, dejando lugar a la alternancia por resignación y no por convicción.
A mi parecer tenemos todo para progresar en estos próximos años, si saben aprovechar la oportunidad de tener una capital que no estará en gracia con la ideología de un gobernador y una ciudad competente como Monclova en la misma situación. Por ende Torreón puede ser el foco de atención para llevarse las mejores tajadas estatales.
Los retos: Atraer inversiones de la IP / Activar la economía / Bajar la mayor participación recursos federales y estatales / Lograr la seguridad pública para activar sectores de la ciudad en opacidad / Y el último, pero no menos importante, mejorar la percepción de los ciudadanos hacia la administración 2014-17 dígase en empleados como en acciones emprendidas.
Termino con la siguiente frase: Cuándo los hechos cambian, cambio de opinión. ¿Qué hace usted, lector? John Maynard Keynes.
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