Para el nuevo proyecto del Mercedes Benz Fashion Week, The Box, Lorena Saravia sugirió que la iluminación fuera muy dramática.
Presentar mi colección en The Box del Mercedes Benz Fashion Week México fue una experiencia nueva e interesante. Para crear lo que vieron los asistentes me propuse varios retos, uno de ellos fue hacer la ropa cien por ciento comercial, con materiales hechos y maquillados en el país.
Lo anterior tenía por objetivo decirle a la industria que sí se puede y que la República Mexicana sabe aprovechar los recursos propios.
También me rehusé a usar color, ése fue otro de los desafíos que me impuse. No lo trabajé porque no lo uso y en el mercado se venden bien los azules, por ejemplo. Supongo que quería limpiar mi paleta de colores. Sólo hubo un vestido borgoña y, con las luces, se vio más encendido.
Para The Box, sugerí que la iluminación fuera muy dramática. Ese espacio fue idea de Cory Crespo, director de la plataforma, y algo que agradezco es que esté pensando en que la industria mexicana explote a través de la promoción.
Quise que mi concepto fuera uniforme: el styling lo hago yo junto a Nayeli de Alba; en las imágenes colabora Fernando Marroquín, quien es un fotógrafo muy destacado.
Considero que esta fue una colección más madura, llena de retos y, para el futuro, quiero seguir experimentando. De hecho, para Primavera, estoy pensando ya en un tono diferente de verde para crear.
Sus creaciones
Mi proceso creativo suele ser muy neutro: no tengo muchas obsesiones en la inspiración y me gusta darle continuidad a mi marca.
La creación de mi colección Otoño-Invierno fue un poco apresurada porque fui elegida para el proyecto Fashion Forward y concentré casi toda mi energía en ello, porque es parte del proceso que estoy viviendo con el crecimiento de la firma.
Al diseñar estaba pensando, más que en culturas o momentos de la historia, en prendas para una mujer fuerte, posicionada laboralmente en lo más alto y que es a la vez ruda y multifacética.
