Partidos de oposición y sindicatos en el país endurecieron su oposición a las reformas propuestas por el gobierno de Enrique Peña.
Ayer el Partido Acción Nacional (PAN) pidió unir esfuerzos contra la Reforma Fiscal, pues asegura que afecta directamente a la clase productiva del país.
Gustavo Madero, dirigente nacional del PAN, presumió que su campaña contra la Reforma Fiscal ha tenido resultados porque el PRI ha dejado de insistir en aplicar impuestos a la venta y renta de viviendas.
El PRI, señaló, ha empezado a dejar de insistir en aplicar impuestos a la venta y renta de vivienda y a las colegiaturas, así como subir el Impuesto al Valor Agregado (IVA) a las maquiladoras en las fronteras del territorio nacional.
Sin embargo, la cruzada nacional contra esa iniciativa continuará en todo el país, a través de anuncios espectaculares, redes sociales, y en las calles con el volanteo, hasta que el Gobierno y el PRI "recapaciten y desechen las amenazas contenidas en esa propuesta de ley" a través de su voto contra la reforma.
Por su parte, el secretario general de la Sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), Rubén Núñez, señaló que el movimiento magisterial está en una etapa de reorganización, pero continuarán sus movilizaciones en la capital y otros estados. Y estiman harán frente común contra la Reforma Educativa planteada por el Gobierno.
El sindicato minero dijo que la Reforma Fiscal ha frenado proyectos importantes en el sector.
Por su parte, la izquierda mexicana continúa con su férrea oposición a la Reforma Energética.
