Unos 900 infantes de marina de Estados Unidos fueron enviados hoy a Filipinas para ayudar a los cientos de miles de damnificados por el tifón Haiyan, informaron fuentes castrenses.
Como parte de la operación de asistencia Damayan (Una mano que ayuda), el gobierno estadounidense envió a los infantes de marina, que se sumarán a las labores del portaaviones George Washington, que ya se encuentra en el área.
La víspera llegó a la nación asiática el George Washington y su flotilla, que incluye nueve naves, 23 helicópteros y siete mil soldados, de los cuales unos 400 trabajan este sábado en tierra en los vuelos de socorro.
En un comunicado, el Cuerpo de Infantería de Marina indicó que también navegan para unirse a las tareas de socorro los buques de asalto anfibio Germantown y Ashland, los cuales llevan agua, alimentos y medicinas para los damnificados.
De acuerdo con la institución castrense, el tifón afectó a más de seis millones 800 mil filipinos y destruyó 150 mil viviendas en 41 provincias de Filipinas.
La duración de las tareas de la Fuerza Expedicionaria 31 dependerá de los pedidos del gobierno filipino y las prioridades de la Agencia Estadounidense para el Desarrollo Internacional (USAID).
