Mes de pago de tenencia o refrendo,
fecha de pagar el impuesto predial;
de sus deudas, la gente va saliendo
para cumplir y sin aumento salarial.
Todas las fiestas de diciembre
con su Nochebuena y su fin de año,
las gozamos con alegría siempre
después llega enero, con su desengaño.
Incrementan las tarifas de servicios:
agua, luz, teléfono, gas y gasolina;
con la canasta básica hay indicios
que la cuesta de enero será “colina”.
La gente compra lo innecesario
en exagerado y frívolo consumismo,
luego, a batallar por el sustento diario
y viendo la realidad con pesimismo.
A la base de todo está el ahorro,
nunca gastar más de lo que se gana
al ingreso familiar “ponerle gorro”,
pues en vanas compras se va la “lana”.
Erogar menos de lo que ingresa
es la clave de la economía familiar;
solamente el hogar así progresa,
después ¡ya no es bueno ni llorar!!!