Esta columna Epigrama llega al número cien,
publicada gracias a la generosidad de El Siglo
nuestro granDiario de fama y prestigio,
que por dos años nos ha tratado muy bien.
Semanalmente, sábado o domingo,
hechos, personajes y situaciones
sin preferencias, favores ni “distingos”
se comentan en este modesto espacio,
por la gentileza del Diario de los Laguneros;
y en su contenido no haymás intenciones
que relatar lo que ocurre en Gómez Palacio,
en la Región y en los Estados, sin dudas ni “peros”.
La ironía, el sarcasmo y la picardía
son características del Epigrama,
sin andarse nunca “por las ramas”
ni llegar al insulto o a la diatriba,
sino sólo decirlo en forma festiva
ymuchas veces, con gran osadía.
Los servidores públicos, electos o por designación,
desde que “protestan” y asumen el cargo,
y aún antes, pero también, de dejarlo después,
por la ciudadanía son
observados en su actuación,
y si por la función que
tienen reciben un pago:
¡se les analiza de buena fe, al derecho y al revés!