Papa Francisco en una homilía.
Escapar de Dios es una tentación cotidiana que consiste en no escucharlo, no oír su voz y no sentir en el corazón su propuesta, ni su invitación, dijo el Papa Francisco. En la homilía dijo que de Dios "se puede escapar directamente" o también existen "formas más educadas y sofisticadas" .
El Pontífice se inspiró en el Relato de Jonás y en las páginas del Evangelio para recordar que "sólo alguien que habitualmente escapaba de Dios, un pecador, un samaritano, tiene en cambio la capacidad de oír la voz de Dios" .