Estados Unidos acusó hoy formalmente a Dino Bouterse, hijo del actual presidente de Surinam, de “tratar de proveer apoyo material y recursos” al movimiento chiíta libanés Hezbolá, considerado una organización terrorista por Washington.
Bouterse, quien era director de la Unidad Antiterrorista de Surinam, ya había sido acusado de conspirar para introducir cocaína en Estados Unidos y por el uso de armas de guerra, según un comunicado de la Agencia Estadunidense Antidrogas (DEA) y la Fiscalía federal.
“Las organizaciones narcotraficantes y las redes de terror son inseparables en muchas partes del mundo”, indicó la comisionada de la DEA, Michelle Leonhart.
“La DEA debe perseguir implacablemente esos individuos peligrosos y grupos criminales que intentan usar las ganancias del narcotráfico para financiar redes terroristas como Hezbolá”, añadió.
Bouterse fue detenido en Panamá el 29 de agosto pasado por pedido de Estados Unidos y extraditado a este país, a donde llegó al día siguiente.
Según el encausamiento, Bouterse usó su cargo como director de la Unidad Antiterrorista de Surinam para apoyar a miembros de Hezbolá (Partido de Dios) a cambio de una paga multimillonaria.
Asimismo, acordó que miembros de esa organización islámica usaran Surinam como base permanente para entrenamiento y operaciones, así como para atacar blancos estadunidenses.