Violencia. Las protestas, los desacuerdos y los conflictos no han cesado en las principales ciudades de Egipto.
Un diplomático estadounidense de alto rango instó el lunes al ejército egipcio y al nuevo liderazgo interino a asegurarse de que exista una transición "incluyente" hacia la democracia, con lo que Washington rechazó las acusaciones de que respalda a alguno de los bandos del país profundamente polarizado.El subsecretario de Estado de Estados Unidos, William Burns, realizó la visita a Egipto de más alto nivel por parte de un funcionario norteamericano desde que el presidente islamista Mohamed Morsi fue derrocado por el ejército el 3 de julio después de días de protestas masivas.
Los opositores de Morsi han acusado a Estados Unidos de apoyar al presidente islamista durante su año en el cargo. Tamarod, el principal grupo activista que organizó las protestas contra Morsi, dijo que rechazó una invitación para reunirse con Burns a causa de la percepción de la postura de Estados Unidos.
Por otro lado, los partidarios de Morsi, incluida la Hermandad Musulmana, acusan a Washington de apoyar el golpe de Estado contra el primer presidente de Egipto elegido libremente.
Burns se reunió el lunes con el presidente interino de Egipto Adli Mansur, el primer ministro designado Hazem el-Beblaui y el jefe de las fuerzas armadas, el general Abdel-Fatá el-Sisi, para hablar sobre el plan de transición propuesto por el nuevo gobierno.
La hoja de ruta prevé la modificación de la constitución redactada por islamistas aprobada durante el mandato de Morsi y elecciones parlamentarias y presidenciales a principios del próximo año.