Crecer. Al concretarse la reforma energética, México podría crecer a una tasa del 5% anual.
De no trabajar en la aplicación y cumplimiento de las nuevas leyes que emanan de las reformas estructurales aprobadas este año, México seguirá imposibilitado para fortalecer su desarrollo y seguirá dependiendo de lo que pase en la economía mundial, consideró el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP). Y es que, dijo, de funcionar como se espera, las reformas estructurales podrían llevar al país a registrar tasas de crecimiento cercanas al 5.0 por ciento.
En su Análisis Económico, el organismo enfatizó que el crecimiento y mejora del bienestar debe provenir fundamentalmente del interior del país, a través de un sector productivo fuerte, apoyado en una legislación que lo estimule y que al mismo tiempo, se convierta en el principal atractivo de la inversión privada.
Recordó que la aprobación de reformas inició a finales del año pasado con la laboral, que en su opinión, no ha rendido los resultados esperados, "aunque esto no debe resultar extraño si la inversión sigue sin fortalecerse porque ninguna reforma laboral generará empleos sin inversión".
En febrero de este año, agregó, se aprobó la reforma educativa a nivel constitucional y en septiembre sus leyes secundarias, "pero seguimos viendo el rechazo de grupos magisteriales y localidades sin clases desde hace varios meses". De igual forma, dijo, se tiene una ley de telecomunicaciones y otra de competencia económica aprobadas por la mayoría de Congresos del país, lo que les da el grado de constitucionalidad, sin embargo, sus leyes secundarias aún están en proceso, lo que sigue generando un relativo entorno de incertidumbre.