Protesta. Así lucía la calle Victoria, entre 20 de Noviembre y 5 de Febrero, ayer por la mañana.
Durango
Transportistas de carga pesada denunciaron que son víctimas frecuentes de extorsión por parte de la Policía Estatal, Vialidad y de Investigación, quienes les piden dinero con amenazas de quitarles sus camiones de procedencia extranjera. Entre tanto, la Policía Federal ni los molesta.
Así lo señaló José Santos Castro González, dirigente de los transportistas de Productos Forestales, quien comentó que los conductores de los camiones de carga se han visto obligados a entregar diferentes cantidades de dinero para que los agentes los dejen trabajar.
"Sabemos que los ciudadanos son víctimas de este tipo de extorsiones todos los días y nosotros, los transportistas de carga pesada no somos la excepción", refirió.
Dijo que de por sí, la actividad que realizan ya es muy incosteable, el trabajo es poco y las ganancias son bajas, de ahí que tomaron la decisión de solicitar la ayuda de las autoridades.
Mencionó que son 400 camiones los que operan en el área forestal, mientras que los materialistas son 52, de los cuales el 40 por ciento es de procedencia extranjera.
Varios camiones tienen ya 16 años en el país, por lo que consideran que las autoridades sí pueden hacer algo para apoyarlos, compromiso que tiene con ellos el Gobierno del Estado, desde principio de la administración.
ABUSO
Mencionó que ni la Policía Federal ha procedido, como lo han hecho las corporaciones estatales y municipales, pues los han dejado trabajar.
Recordó que a los transportistas les dijeron que al poner el engomado que promueve el Gobierno del Estado, no tendrían problemas; sin embargo, los siguen deteniendo y exigiendo dinero bajo la amenaza de detenerlos y quitarles sus unidades.
Para exigir respaldo, ayer arribaron 60 dompes a la ciudad, de los cuales algunos fueron estacionados ayer por la mañana sobre la calle Victoria, entre 20 de Noviembre y 5 de Febrero, frente a las oficinas de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC).
Son alrededor de 400 familias las que se ven afectadas de forma directa o indirecta por este tipo de abusos y aún así la protesta es pacífica, refirió el líder transportista.
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